You Rock My World - Kookmin

Capítulo 23

Silencio...

  Era lo único que había en mi habitación, acompañado de la luz tenue de aquella lámpara que colgaba en una esquina.

  Los nudillos en sus manos estaban maltratados y su semblante lucía decaído.

  Entrelacé nuestros dedos y escuché el suspirar en su respiración.

— ¿Quieres hablar? — pregunté tratando de no presionarlo pero queriendo que supiera que estaba preocupado.

— ¿Viste los periódicos? — dijo sin mirarme, solo acariciaba mi mano con la suya.

— No importan...

— Mi debut se fue a la mierda y luego ellos... Comenzaron la promoción de ese hijo de puta...

— Mírame — ordené y casi me quiebro al ver sus ojos cargados de lágrimas — tienes otras presentaciones... Tu promoción no ha terminado y aún está en proceso tu vídeo mix. ¿Te rendirás?

— ¿Y la prensa?

— Que se vayan al demonio. Yo estaré a tu lado apoyándote... Y sé que quizá no sea la gran cosa per-

Jungkook se lanzó a mis brazos y escondió su rostro en mi cuello — ¿Por qué?

— ¿Por qué? — pregunté de vuelta.

— ¿Por qué eres tan bueno conmigo?, ¿por qué haces que te quiera de esta forma?

  Me alejé un poco para verlo porque jamás imaginé a Jungkook diciéndome ese tipo de cosas...

— ¿Me quieres? — pregunté con el corazón a punto de salirse de mi pecho.

— Te quiero muchísimo... Pero no te merezco...

— ¿Por qué dices eso?

— Jimin... Hay algo que tengo que decirte.

  El sentimiento bonito que había en mi estómago se convirtió en unas terribles náuseas.

— ¿Pasó algo?

— Yo... E-esque...

  Alguien tocó mi puerta y la suave voz de mamá se escuchó detrás — Jimin... Corazón.

— Espérame — me levanté dejando un beso en sus labios y salí de la habitación para hablar con mi madre — ¿Qué pasa?

— Matthew... — me miró con los ojos abiertos a más no poder — está abajo.

— ¿¡Qué!?, pero si aún no han pasado los seis meses, ¿qué hace aquí?

— No lo sé pero trajo flores y quiere verte. Le dije que yo vendría por ti porque no te sentías muy bien, pero está en el sillón esperándote — todo lo hablábamos susurrando.

— Entonces creo que llegó el momento.

— ¿Estás seguro?

— Sí, mamá, hablaré con él. Terminaré nuestra relación para poder estar con Jungkook.

  Mamá sonrió y tomó mis manos — ve a hablar con él... Yo me quedaré con el apuesto chico para que no se sienta solo.

— Gracias — nos abrazamos y bajé al primer piso donde Matt me esperaba sentando en el sofá con un pequeño ramo de flores.

  Al verme se levantó de inmediato y sonrió — Cariño...

— Hola... ¿Qué haces aquí? — inquirí recibiendo el detalle que me había traído.

— ¿No te alegra verme?

— No he dicho eso...

— Pero no luces felíz...