Devil by the Window

Capítulo 26

La alarma sonó, aunque decidió dormir un poco más ya que su trabajo estaba casi concluso. Después de una hora se levanto de la cama, preparo un poco de café y calentó las sobras de la cena de la noche anterior para su desayuno, encendió su laptop y termino de escribir ese informe.

Interrumpió su trabajo un momento para desayunar y escribir el mensaje de confirmación a su cliente para su cita de esta tarde, si las cosas terminaban bien esta tarde entonces podría disfrutar de no trabajar por un tiempo. 

Termino el desayuno y luego el reporte, tomo una ducha y se puso en marcha para el lugar acordado, miro aburrido el lugar y soltó un suspiro cuando supo que su cliente venia tarde ya que estaba atorada en el trafico para aparecer una hora después.

—Lo siento mucho... jamás pensé que se haría un embotellamiento, al menos se libro mas rápido de lo que creí— dijo la chica sentándose a la mesa.

—No se preocupe, a veces suceden esas cosas— respondio tranquilamente mientras sacaba las hojas de su informe.

—Lamento informarle que sus sospechas son reales... su esposo tiene un amante, aquí tiene todas la pruebas— dijo mostrándole las fotografías.

La mujer miro atentamente todas la fotografías y luego se cubrió el rostro, soltó algunos sollozos y luego trato de mantener la compostura levantando la mirada.

—Tenia la ligera esperanza de que todo fuera mentira— dijo soltando un suspiro.

—Con la pruebas que le estoy mostrando fácilmente podría obtener el divorcio y una buena cantidad de su dinero— menciono.

—Lo sé... es solo que... es estúpido, pero pienso hablar con él primero y ver si podemos arreglarlo, le daré la oportunidad de hacerlo y en ultimas instancias lo demandare con ayuda de esto— dijo ella guardando todo en un sobre.

—Es su decisión, si quiere puedo recomendarle un abogado por si eso sucede— respondio tratando de no mostrar sus verdaderos pensamientos, sin embargo, la mujer sabia muy bien lo que pasaba por su mente.

—Sé que suena estúpido, pero lo amo... es extraño aun amar a alguien cuando sabes que ha hecho algo malo... debe pensar que estoy loca ¿no, detective Altin?— dijo la mujer. Otabek se quedo callado un momento ante aquella pregunta.

—No lo creo, señora... a veces las personas actuamos de maneras extrañas que los demás pueden interpretar como locura y lo digo por experiencia— respondio tranquilamente.

—Muchas gracias, nuevamente... ¿puede verificar si ya le ha llegado la transferencia?— pidió amablemente la mujer.

Una vez que Otabek le confirmo, ambos se dieron un apretón de manos y terminaron su relación. Volvió a casa, durante el camino compro un poco de espagueti para la cena y algunos premios para su perro.

Al llegar a su departamento fue recibido por Blue, el perro husky que lo había estado acompañado desde hace casi cinco años cuando se mudo de regreso a Almaty. Blue era el regalo de despedida por parte de Seung y una forma de disculparse por todo lo que ocurrió, Otabek le dejo en claro que no lo culpaba de nada y sobre todo le deseo que fuera muy feliz.

Sirvió el espagueti en un plato y lo metió al microondas, busco alguna película recomendada en Netflix y comenzó a buscar en su correo del trabajo algo en que gastar su tiempo, el suficiente tiempo como para no pensar en su pasado.

Desde hace cinco años no ha mantenido contacto con ninguno de sus amigos como una forma de tratar de superar lo que ocurrió y había funcionado al menos un poco, pero ahora con la platica que tuvo con su cliente inevitablemente recordó a Yuri.