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Jimin había tardado demasiado cambiándose la camisa, posiblemente porque había estado sollozando frente al espejo, sin comprender que era lo que hacía mal para que Yoongi siempre terminara de él, despavorido y aterrorizado. El rubio estaba seguro de que había algo totalmente mal en él.

No comprendía por qué su mayor había huido luego de declarar aquellos sentimientos, por qué había decidido alejarse cuando estaban tan cerca, no había una explicación que no tuviera como conclusión que se trataba de él.

Quizás Jimin era demasiado empalagoso, sentía con demasiada intensidad y de forma muy visible, lo cual aterraba a Yoongi pues ni siquiera eran novios y ya Park sentía corazones flotar alrededor de ellos cuando tan solo se miraban. O quizás simplemente Yoongi lo amaría de esa forma, por ratos, con miedo, huyendo cuando la situación se pusiera demasiado seria.

Acostumbrado al amor a medias, a rogar y esperar a que los demás estuvieran dispuestos a quererlo, finalmente bajó las escaleras, caminando hacia la piscina. Honestamente, no tenía a dónde huir: Jungkook estaba con aquel molesto muchacho de cabello azul que siempre tenía algún comentario imprudente que hacer, Taehyung estaba hablando con el que parecía ser el anfitrión de la fiesta y Yoongi ni siquiera estaba en el patio.

Sin más remedio, decidió acercarse a Kim, esperando que este no se enojara por interrumpirlo.

Posiblemente Taehyung era demasiado tranquilo o Jimin había vivido una vida demasiado dura, como para pensar que se molestarían y le gritarían por acercarse a otros mientras estaban en sus cosas.

— ¡Jimin! Hola, mira, te presento a Hoseok —saludó al instante el pelirrojo, tomando al rubio por los hombros y acercándolo a su otro amigo—. Anteriormente no tuvieron tiempo de presentarse bien.

— Un gusto —dijo aquel muchacho de mechas blanquecinas, con una sonrisa en forma de corazón encantadora. Era sumamente hermoso, como si de una escultura tallada se tratara, sus rasgos eran filosos y su perfil era divino, además de tener unas manos muy cuidadas.

— Igual, me llamo Jimin —dijo el menor algo apenado, sentándose junto a Taehyung en una de las tumbonas.

La forma en la que aquel hombre lo miraba, con su sonrisa coqueta de medio lado y sus ojos analizando cada una de sus facciones hacía a Park sonrojarse apenado. Nunca se había sentido observado de una manera tan seductora y a la vez sin ni una pizca de perversión, solo como si lo hallaran bonito e interesante.

— Oh, voy a ir a ver que hace Jungkook con Yeonjun, los escuché hablando de Jennie hace unos segundos —dijo Taehyung, con un disimulo casi forzado, como si se estuviera mordiendo la lengua y aguantando las ganas de gritar. Había visto al castaño sentarse en una de las sillas de la barra, y aquella muchacha de bañador bastante ajustado estaba casi sentándose sobre él mientras conversaban.

Sabía que aquel niño llorón, que se la pasaba la mayoría del tiempo en la casa de los Kim viendo dramas coreanos mientras lloraba por la pareja protagonista y comía golosinas era incapaz de engañarlo, pero se sentía incómodo con aquellas mujeres invadiendo su espacio e irrespetando los límites que Jeon a veces trataba de marcar.

A veces porque no siempre lo hacía, muchas veces tan solo se dejaba toquetear superficialmente por aquellas féminas coquetas, buscando una oportunidad, con tal de que nadie comenzara a pensar que las mujeres no eran lo suyo. El de hebras rojizas sabía que no era su culpa, tenía sus razones para ocultarlo aún, pero le dolía vivir aquellas situaciones.

Cuando el menor se levantó para encaminarse al lugar donde se encontraba su novio, Park se quedó a solas con aquel guapo hombre de piel tostada por el sol.

— ¿Estás disfrutando, Jimin? —la pregunta era inocente, simplemente buscando sacar tema de conversación.

— Umh, sí. Tu casa es linda —respondió, removiéndose en su asiento. Aquel hombre le había dado un sorbo a su vaso y allí fue cuando Park miró ese vaso con una sustancia rojiza, se había topado con otro gay que solo se dejaba salir cuando bebía.

wish you were sober | yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora