LULI'S SONG || MARTULI

-11-

Pov Luli

Como todo domingo familiar, con la familia de Marti y mi familia fuimos a pasar el día al Tigre. Alquilamos una pequeña cabaña y fuimos con la lancha de Dan, que era bastante grande.

Mientras nuestros padres estaban en sus conversaciones, Franco tomaba sol y Delfi jugaba con una nena de la cabaña vecina. Después estabamos Martina y yo sentadas en el borde del lago, pero sin hablar nada. Ella por momentos me miraba y cuando yo la veia, desviaba su vista hacia otro lado.

—Es imposible que mañana sea lunes, quiero quedarme asi por el resto del año. —dije mientras me recostaba sobre el suelo.

—¿Que tal tu cita anoche? —largo de repente.

—Bien, estuvo...bien. —conteste.

—Vamos Lourdes, soy tu mejor amiga, ¿solo me vas a contar eso? —levanto una ceja.

—Esta bien...—volvi a sentarme. —¡Nos besamos! —dije con cierta emoción pero ella no parecia estar igual.

—Ah. —se limito a decir. —Tu primer beso.

—Si, la verdad que no tenia pensado que sea ayer o con ella pero, creo que si me gusta. —confese. Ella asintió y esa fue toda nuestra charla por el resto del día.

Y por el resto del mes. Desde ese día habian pasado otros 30 donde Martina no me hablaba o solo me decia lo justo y necesario. Siempre que queria invitarla a hacer algun plan, o juntarnos como soliamos hacerlo, ella me ponia una tonta excusa o me evitaba.

—Luli, ¿estas aca? —pregunto la morocha sacandome de mis pensamientos.

—Si, si perdon, estaba pensando en otra cosaa...—le respondi. —¿Qué me decias?

—Que deberiamos hacer algo grande para tu cumpleaños. —ah cierto, mi cumpleaños.

—No creo, no estoy con muchos animos de festejar y ademas tampoco tengo muchos amigos. —levante los hombros.

—Esta bien, descartada la fiesta. —dijo. —Pero algo deberiamos hacer.

—¿Y si nos vamos a algún viaje por el fin de semana? —sugirio Angie.

—Esa es una muy buena idea. —apoyo Vicky.

—No lo se, ¿les gustaria? —tanto Brisa como Angie y Victoria asintieron. —Esta bien, entonces podriamos hacerlo.

—Y no creas que te salvaste de festejarlo el miercoles eh, porque ya hable con tu mamá. —agradecia la importancia que mi, ahora novia, le daba a mi cumpleaños, pero yo realmente no tenia ganas de hacer nada.

No si Martina no me hablaba. Seria el primer cumpleaños de mi vida en el que ella y yo no estabamos en las mejores condiciones y eso me ponia algo triste.

Los días siguieron pasando, ya era martes en la noche, en tan solo 30 minutos ya iba a cumplir 17. Suspire mirando hacia la ventana de la rubia, estaba cerrada y con todo apagado. Eso indicaba que quizas estaba durmiendo o no estaba, volvi a ponerme triste. Ella siempre me saludaba a las 12 en punto.

—Que los cumplas feliz, que los cumplas feliz, que los cumplas Lulita, que los cumplas feliz. —mis padres junto a mis hermanos entraron a mi habitación con una pequeña torta y una vela.

—Feliz cumple Luli. —me abrazo mi hermana pequeña.

—Gracias, gracias a todos. —apague la vela.

—Ya esta tan grande mi princesa. —dijo mi mamá con gran emoción.

—Hay alguien más que quiere saludarte. —hablo mi padre y por un minuto crei que entraria Martina.

—Feliz cumple hermosa. —era Victoria.

—Gracias. —me beso.

No me mal interpreten, me encantaba el gesto y que haya venido hasta aca a saludarme. Pero me desilusiono un poco que sea ella y no mi mejor amiga.

Mi familia se fue y quede solo con la morocha en mi habitación.

—Esto es para vos...—me entrego una bolsa.

Adentro habian varias cosas, para empezar un remeron de Billie Elish, ella sabia que me gustaba y la verdad que me encanto. Tambien un cuadra con una foto de nosotras dos que nos sacamos los primeros días que empezamos a salir, una bolsita con varias puas y por último un collar con el dije de una guitarra, atras estaba grabado con nuestras iniciales.

—Me encanto todo. —la bese. —De verdad, muchisimas gracias.

—Me alegro de que te haya gustado. —volvimos a besarnos y esta vez intensificamos un poco más. Ambas quedamos acostadas y Victoria puso mi mano derecha en su trasero, me sonrio y volvio a besarme. No tenia planes de que suceda nada más, pero tampoco iba a negarme si es que llegabamos más lejos. Aprete esa zona donde ahora se encontraba mi mano y la pegue un poco más a mi, mi otra mano estaba en el borde de su remera, la levante con cuidado, casi pidiendole permiso y su efusividad hizo que termine de tomar la decisión y termine por sacandosela. Ella tenia un corpiño de encaje negro, realmente me volvia loca. Hasta que de repente...

—¿Puedo pasar...—la voz de Martina abriendo la puerta hizo que nos sobresaltaramos. —Perdon perdon, les juro que...yo no...sabia.

—Esta bien, no pasa nada. —dije de inmediato cubriendo a Victoria mientras se ponia la remera. —No tenias porque saberlo.

—Creo que voy al baño....del pasillo. —dijo la morocha y yo asenti. Una vez que salio de la habitación, quede sola con Martina.

—De verdad perdón Lourdes, yo no sabia. —volvio a decir.

—Tranquila. —toque su hombro.

—Feliz cumpleaños. —me dijo mirandome fijamente.

—Gracias. —respondi. Y ambas quedamos en silencio.

—Te traje algo, espera aca. —yo hice caso y espere a que volviera a la habitación. Ella arrastro una gran caja cuadrada hasta adentro del cuarto.

—¿Y esto? —me reí.

—Abrilo. —me indico.

Comence a abrirlo y me lleve una gran sorpresa.

—Mar, pero esto es...—no dejaba de sorprender.

—Un amplificador. —confirmo.

—Gracias, gracias, gracias. —salte de emoción y me tire encima de ella para abrazarla.

—De nada. —me dijo una vez que nos separamos. —Perdon por haber sido una terrible mejor amiga todo este mes, no se que esta pasando conmigo pero te extrañe mucho.

—Yo tambien te extrañe Mar. —le dije sincera.

—Volvi...¿y esto? —Vicky pregunto curiosa.

—Marti me regalo un amplificador. —le conte. —¿No es genial?

—Si, si lo es. —dijo la morocha.

—Bueno, yo me voy a ir...—hablo la rubia. —Buenas noches y perdón otra vez por...interrumpir.

Se fue dejandonos solas y yo por el resto de la noche no pude dejar de pensar en ella. ¿Qué es eso que la tenia tan mal a Martina? ¿Por qué siempre se alejaba de mi?