LULI'S SONG || MARTULI

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10 años más tarde.....

Pov Marti

—Necesito que tengas todo listo para mañana a primera hora y que sea perfecto. —le dije a mi secretaria. —Y por favor, que Lourdes no se entere de nada.

—Perfecto, esta todo anotado. —me contesto. —Quedese tranquila señorita Benza, va a salir todo bien.

—Señora...—la corregí mostrandole el anillo en mi dedo.

—Señora, disculpe. —dijo y agacho la cabeza.

—¿No crees que te estas apresurando Benza? Lourdes todavía tiene 3 días para arrepentirse de esto. —Angie entró a mi oficina.

—Siempre tan graciosa vos. —rode los ojos. —Tuvo 1 año para arrepentirse, de hecho, tuvo toda una vida para arrepentirse y no lo hizo, así que yo ya me considero casada.

—Claro claro, esto es solo una formalidad. —hablo mientras se sentaba frente a mi escritorio. —Todos sabemos que si fuese por Lourdes te hubiera propuesto casamiento cuando teniamos 16 años.

—¿Esa no serás vos? Me acuerdo que querías escaparte con Brisa para casarte en las vegas ¡A LOS 18! —le recordé.

—Lo vi en un video de Youtube y parecía bastante divertida la idea. —levanto sus hombros. —De todas formas años después cumplí mi sueño. —ellas dos se habian casado a los 25 años, en un viaje sorpresa que Brisa planeo a las vegas por el cumpleaños de la peliazul.

—Y gracias por invitarnos eh. —dije sarcasticamente. —Deberia haber reconciderado invitarte a la mía.

—Soy tu dama de honor ¿como no iba a estar? —alardeo.

—Sos la dama de honor de Lourdes que es diferente. —le conteste.

—Como sea. —dijo restandole importancia. —¿Y ahora que estas planeando?

—Una despedida de soltera. —vi como ella empezó a sonreír picaramente. —Para mi y para Lourdes. —se le borro de inmediato.

—Si sabes que las despedidas de soltera son lo contrario a eso ¿no? —me dijo como obvio.

—Lo se, y todavía van a tener su despedida, de hecho Camila y Guada estan planeando una para mi. —le aclare. —Pero quiero que tengamos algo más...privado, para nosotras dos.

—Que degenerada resultaste ser Martinita. —odiaba que me llame asi. —¿No podes aguantarte hasta la luna de miel?

—Quizas la mente pervertida aca sea la tuya porque yo no estaba pensando solo en sexo. —le respondí haciendo que baje sus pies de mi escritorio. —Quiero darle una sorpresa romantica.

—No te la crees ni vos. —se rió.

—¡Aca estas! —entró Brisa enojada.

—Uh se te viene. —le dije divertida mientras me acomodaba en mi silla para ver el espectaculo frente a mi.

—Te busque toda la mañana Angie, estoy de mal humor, con dolores, con mucho antojo de chocolate y vos estas...boludeando con Martina. —la furia de la castaña se dejaba ver. —Hola Marti.

—Hola Bri. —le respondí el saludo.

—Vine a ver si necesitaba ayuda con lo de la boda y...—Brisa no la dejo terminar de hablar.

—Si este hijo tuyo que tengo aca en mi panza sigue pateandome porque quiere chocolates voy a patearte yo a vos. —si, Brisa estaba embarazada de ya casi 9 meses.

—Perdón, ya voy a comprarte los chocolates que quieras amor. —se levanto de inmediato.

—Angie tene cuidado cuando salgas no te vayas a tropezar pisando tu pollera. —bromee y ella clavo su peor cara de culo. No tuvo tiempo de responderme porque Brisa ya estaba detrás de ella esperando que se moviera.

Después de que se fueran y la paz volviera a reinar mi oficina, termine de contestar los mails pendientes que me quedaban para poder terminar de una vez mi día laboral.

Cuando termine la escuela no tenía ni idea de que quería estudiar. Estuve bastante perdida y confundida como por 1 año y medio hasta que un día en unas vacaciones en Catamarca con mi tío, no se le ocurrio mejor idea que dejarme a cargo de su bodega en Buenos Aires. Manejarla se me hizo dificil al principio, pero hoy en día siento que fue la mejor decisión que podría haber tomado. Ahora estaba planeando abrir una nueva más cerca del centro y me ponía contenta que sea mi primer proyecto propio y liderado por mi.

Por otra parte, Lourdes siguió muy metida en el mundo de la música. A ella le encantaba aprender a tocar nuevos instrumentos y tambien compartir esos conocimientos, empezo siendo profesora de guitarra, daba clases a un pequeño grupo de personas que cada vez se fue haciendo más grande, y de ser solo guitarra, paso a bateria y de bateria, tambien a piano, y asi hasta que se abrio su propio estudio de música donde no solo enseñaba sino que tambien tenía una cabina de grabaciones, Lourdes había creado, en estos últimos 10 años, una productora propia y eso la hacia tan feliz a ella como a mi.

Hace 1 año, Lourdes y yo nos propusimos matrimonio al mismo tiempo. En un viaje que hicimos a Estados Unidos, era nuestro noveno aniversario y se ve que pasabamos tanto tiempo juntas que nuestra neuorona ya era la misma compartida. Así que de forma romantica y torpe, las dos sacamos un anillo. Y ahora, un año más tarde, estabamos a 3 días de casarnos.

—Hola muuu. —mi madre entro a la oficina. —Te traje unas muestras de los arreglos de flores para el sabado.

—Ya te dije que las flores ya las elegimos con Lourdes. —le conteste.

—Lo se lo se, pero lamento decirles que no tienen buen gusto. —puso una cara de asco. —Mira que hermosas estas peonías.

—¿Si te digo que si vas a dejar de molestar? —le pregunte y ella asintió. —Esta bien, encargalas.

—Ya lo habia hecho hija. —se rió orgullosa. —Mañana mismo las traen.

—Siempre te salis con la tuya eh. —negue con la cabeza.

Cuando termine con lo que tenía que hacer, fui a almorzar con mi madre. Le conte de mi plan para mi noche con Lourdes el jueves, a ella le encanto y me ayudo a hacer las reservaciones. Más tarde pase por lo de Nicolas y fuimos a la prueba de traje de él y Gian, ellos serian los padrinos. Y cuando el día finalmente termino, llegue a mi casa para prepararnos la cena a mi y a mi novia.

—Hola amor. —llego ella por fin. —Que rico olor, que estas cocinando.

—Unas pastas caseras. —le respondí besandola.

—Me encanta. —dejo sus cosas en el living y me ayudo a poner la mesa. —Perdón que hoy tarde más de lo que quisiera pero una banda alquilo el estudio para grabar un albúm así que eso me ocupo todo el día.

—¿Y estas cansada no? —pregunte.

—Demasiado pero no para vos...—me abrazo por atrás. —Así que quizás después de cenar podriamos tomar un baño juntas.

—Pensé que la etapa hormonal se te iba a terminar a los 19. —bromee.

—¿Vos te viste? Sos la mujer más hermosa del mundo, no es posible que me pueda resistir ni teniendo 80 años. —hablo mientras besaba mis hombros.

La cena paso entre charlas sobre nuestros trabajos y arreglos sobre los últimos detalles que faltaban para la boda. A veces, en momentos asi de cotidianos, me paraba a pensar en todo lo que habiamos construido con Lourdes hasta ahora y todo lo que nos faltaba por construir, eramos una familia y estabamos en NUESTRO propio hogar. Yo me iba a dormir todas las noches con ella y me levantaba con ella, no había nada que me hiciera más feliz.

O quizas si, llamarla mi esposa. Y solo faltaban 3 días.