Wild city (TXT Y BTS, Solo Bl)

Capitulo 1:La evolución convergente

No toda la sociedad humana evolucionó a partir de los primates, la naturaleza permitió que otras especies también llegarán a la cúspide de la pirámide de manera convergente, esto significó que desarrollaron características similares sin la necesidad de estar emparentados.
Cada especie de seres humanos tenía características propias de la familia a la que pertenecían y si bien era posible el cruce entre estas, rara vez producía descendencia.
Aquellos puros, que podían cambiar a su forma ancestral, se les denominaba alfas. Eran pocos y cada año que pasaba lo eran menos.
Se decía que habían sido malditos por la luna y las personas más supersticiosas que traían solo desgracia a la familia.

La sociedad a lo largo del tiempo fue cambiando. Y se los amó y repudio de igual manera, ahora se podría decir que existía un clima de "tolerancia", se les permitian que usaran su forma bestial en lugares públicos y gubernamentales, pero no era extraño que en bares, restaurantes u otros lugares de ámbitos privados se hallaran carteles de prohibido su ingreso.

Yoongi era un joven alfa, un extraño ejemplar de leopardo de las nieves, su familia se sorprendió de sobre manera cuando éste nació en su forma no humana, hacía más de un siglo que esto no sucedía dentro de su árbol genealógico.
Pero la noticia no fue bien recibida, su familia no contaba con muchos recursos y si bien la primaria y secundaria permitían que cualquiera pudiera acceder a la educación, casi el 90% de las universidades e institutos privados se les prohibía el ingreso o la matrícula podia ser hasta el triple de costosa, que la de un alumno común.
Para el joven que su sueño desde que era un pequeño fue el de convertirse en un gran artista, tuvo que ahorrar y trabajar muy duro para poder pagarse la matrícula y ayudar a su familia económicamente, ahora que su hermano menor había crecido podía darse el lujo de relajarse y dedicarse a sus estudios.

Por lo general la mayoría de los estudiantes ingresaban ni bien terminaban sus estudios secundarios, pero al joven le tomó más de cinco años ya que el instituto de bellas artes exigía para aquellos estudiantes "especiales" el pago total de los tres primeros años de la carrera, un gran desembolso de dinero que era lo equivalente a la compra de un departamento.
No era de extrañar que la mayoría de los alfas se dedicarán a trabajos de fuerza bruta con poca o nada de preparación académica. Pero a pesar de esto el joven leopardo, jamás se sintió desanimado y estaba por sobre todas las cosas muy orgulloso de sí mismo, ya que para él la suerte no existía y cada triunfo lo tomaba como fruto de su propio esfuerzo.

-Beomgyu, hoy es mi primer día de clases te quedas a cargo del taller, si viene un cliente pideles las llaves y la cédula.- Quizá su hermano aún era muy joven para dejarlo solo pero no tenía muchas alternativas, confiaba en que las cosas que le había enseñado fueran suficientes para manejar el negocio en su ausencia.- Usa esto si las cosas se salen de control.- Le entregó un arma Glock 17c- Está descargada, aquí están las balas.- Se las entregó en una caja.
-Donde la conseguiste.- Quizá la única cosa que su hermano se le había olvidado enseñar era a usar un arma.
-Era de papá, nos vemos más tarde. Ah, por cierto, nunca apuntes a la cabeza. Siempre apunta hacia las piernas y las rodillas.
Abrazo a su hermano y se fue en su motocicleta rumbo al establecimiento, le tomaría al menos unos 40 minutos en llegar.

El instituto era extremadamente grande, ocupaba una manzana completa. Yoongi aparcó su preciada moto cerca de la entrada, no tardo en bajarce de ella cuando otro estudiante que iba a aparcar piso con la rueda de su auto un charco salpicándolo en el proceso.

-¿Eres idiota?.- Gritó.
El joven salió del vehículo, era un poco más alto que él y claramente no tenía intenciones de pelear.
-Disculpame no fue mi intención...- Lucia un poco despeinado y su tez era de un tono moreno
-¿Crees que me importa una mierda si fue tu intención o no? Mira mi ropa.-Lo tomó del cuello de la camisa.
Otro chico se bajó del auto, estaba tan enojado que ni siquiera se percató de que eran dos los que venían en el mismo vehículo.Este chico era mucho más delgado, bajito y de rasgos delicados. Tomó su brazo con el cual sostenía a su compañero.
-Suéltalo, fue un accidente.- Bajo automáticamente su agarre y este inmediato ayudó a su compañero el cual parecía estar al borde de las lágrimas.- psicópata.
-¿Que tienes niñera, que no puedes defenderte solo?-
-Es sordo idiota.- Tomó la mano del chico y le hizo una señal con sus manos.
-Estoy bien.- Respondió este.
-¿Y que además de ser sordo es ciego para no ver ese poso?.-
El menor se giró con el puño cerrado y lo golpeó haciéndole sangrar el labio. Quería devolvérsela, pero la rabia que crecía desde su interior provocado por el dolor hacía que tuviera que luchar contra sí mismo para evitar el cambio. Probablemente sería expulsado si continuaba de esa forma.

Tomó su mochila, y se alejó,ese si que no había sido un buen inicio. Para su suerte los pasillos eran largos y silenciosos, necesitaba tranquilizarse antes de entrar a clase.
En las paredes del lugar había réplica de cuadros famosos que ayudan de cierta manera a bajar su ansiedad. La institución era una de las más prestigiosas en Bellas Artes, tenía prácticamente todas sus ramas, sumado teatro y danza.

El destino debía odiarlo de cierta manera, pues aquel chico con el que había discutido hace solo unos momentos se encontraba dentro del salón, pero no podía darse el lujo de no ingresar ya que este era su primer día.
Esperaba que al menos no notarán su presencia, pero fue cruzar el umbral de la puerta y todos voltearon a verlo.
-Maldición.- Dijo para sí mismo, como era de costumbre una especie de sombra negra lo acompañaba, que hacía sentir a cualquiera muy incómodo, era casi imposible para él el pasar desapercibido.

-Me presentó, mi nombre es Kim Namjoon y daré la materia de Historia del arte, iremos desde el paleolítico hasta el Arte povera, espero que al terminar la materia hayan sentido que viajaron a través del tiempo a todos los lugares que el ser humano dejó su huella plasmada y no como una aburrida y larga línea de tiempo.
-Es sexy.
-¿Profe nos da su número?
-¿Tiene Instagram?
-¿Tiene novia?
No de nuevo, pensó el profesor que había dejado de dar clases en la escuela secundaria creyendo que ya no tendría este tipo de problemas con personas más adultas pero al parecer sus esfuerzos fueron en vano.
-Dare mi correo solo para uso institucional, pido por favor no enviar nada que no esté relacionado a la materia.
-Ohh-Exclamó medio alumnado.

Y así comenzaba el primer ciclo del año.