Poco común - [Stony]

V E I N T E

Tony puso su mano en la boca de Loki y negó con la cabeza. El de ojos verdes lo miró confundido.

—Di que no estoy.

Susurró Tony, pero Loki alzó una ceja y quitó la mano de su amigo.

—Es tu maldito camerino, idiota.

—Joder.

—¿Qué está pasando, Tony?

—Shhh.

Dejaron de susurrar cuando escucharon la voz de Jarvis, el guardia de seguridad de Antoshka.

—Señor, un cliente.

Tony tenía miedo, después de ver a Steve en el público se imaginó lo peor. Pero es imposible, ¿no?, ya lo rechazó dos veces, y además el rubio no contaba con esa cantidad de dinero.

Seguro es uno de sus clientes frecuentes que detesta, y no sabe cuál situación sería peor.

—Señor, un cliente quiere sus servicios.

Habló nuevamente Jarvis tras la puerta.

Ambos amigos se miraron y levantaron tan pronto como pudieron del sofá. Tony se puso su máscara y Loki se cubrió con la diminuta capa que solía utilizar en sus shows.

—¿Vas a aceptar?

—No sé, ayúdame.

Toques en la puerta nuevamente, y eso asustó a Tony. Detesta los bailes en privado aunque dejen mucho dinero.

Muchas posibilidades estaban en su mente, pero había descartado por completo a Steve Rogers.

—¿A qué?

—Si es un viejo asqueroso, te quitas el traje y actúa como si estuvieras aquí por mi.

—Te encantaría, pero mis gustos son más altos y rubios.

—Joder, Loki, ¿puedes dejar de pensar en tu novio?

—Estoy bromeando, sólo abre la puerta, yo estaré en la cama.

Tony respiró hondo antes de acomodar su traje, y abrió la puerta con algo de miedo.

Saludó a Jarvis con un asentimiento, e intentó lucir seguro y sexy al apoyarse en la puerta (que sólo abrió hasta la mitad).

—¿Quién requiere de mis servicios, Jarvis?

Preguntó Antoshka como si nada, con una de sus manos acariciando la puerta de forma lenta.

—Un joven, señor.

Jarvis se hizo a un lado y si no fuese por la máscara, Antoshka definitivamente hubiese llevado su mandíbula hasta el suelo por la impresión.

Joder, Steve.

El bueno y maldito de Steve estaba frente a él, con sus manos detrás de su espalda, tan correcto y limpio como siempre suele estarlo, está aquí, está esperando un baile en privado con él.

¡Un jodido baile privado con su compañero de proyecto!

Las piernas le temblaron de los nervios, mientras ambos hombres tras la puerta esperaban su respuesta.

—¿Todo está bien, señor?, puedo sacarlo de aquí si desea.

—Yo...

Steve hizo una expresión, una maldita expresión que estrujó el corazón de Antoshka, se veía incómodo de pronto e incluso decepcionado.

"Steve, te prometo que no eres tú, que no es tu culpa" pensó Tony sintiéndose igual de torpe.

—Sí, por supuesto cariño, ven conmigo.

Aceptó por inercia, y vió por el rabillo del ojo que Loki salía de su camerino por la puerta trasera.

Jarvis le dio el dinero, y Antoshka asintió al tomarlo. Luego, Steve entró al camerino.