Poco común - [Stony]

V E I N T I T R É S

Mierda, lo que faltaba. Ver una prenda de la persona que quería sacar de su vida. Fantástico.

—Señor, ya vamos a cerrar.

Suspiró de mala gana, pero tomó la bufanda de todos modos y la metió en su mochila. Una vez vestido, abrió la puerta de su camerino.

—Gracias Jarvis, buenas noches.

—Buenos días en realidad, señor. Loki lo espera afuera.

—Gracias por el aviso.

Sonrió un poco, poniéndose la capucha y unos anteojos de sol intentando cubrir su rostro o al menos pasar desapercibido.

El local ya estaba casi vacío de no ser por las chicas de limpieza porque ya estaba amaneciendo.

Dios, qué día agotador.

—Hey, por fin.

—Hola Loki.

Tony sonrió un poco más calmado, volver a la habitación con su compañía siempre era bien recibido.

—¿Ya vas a contarme qué demonios pasó?

—No, así que muere con la duda.

[...]

Miraba la bufanda a cuadrillé azul sobre su escritorio. Maldita bufanda.

—Jódete Steve.

Maldijo en voz baja, aún con los ojos clavados en esa bufanda de algodón con perfume varonil.

—No te la voy a devolver jamás.

Hacerlo sería exponerse, además no es que el rubio la necesite, seguro tiene más bufandas. Además, el invierno ya estaba por terminar, no es una necesidad.

Le había contado la situación a Loki mientras caminaban al campus, y la respuesta no le gustó nada. Definitivamente Loki está equivocado.

Él no gusta de Steve. Es imposible, sólo se dejó llevar por el atractivo rubio y porque el momento se dio así, eso es todo.

[...]

Habían pasado tres horas y cuarenta minutos desde que Steve volvió a su habitación en el campus de la universidad, y sin embargo, aún no podía conciliar el sueño.

Su mente estaba trabajando a mil pensamientos por minuto, sus emociones estaban revueltas, y su corazón estaba totalmente vivo y encendido.

Pasó de la felicidad a la preocupación, e incluso pasó por la culpa. Pensar en Tony mientras estaba en un momento de placer lo hizo sentir culpable y confundido.

Literalmente estaba cumpliendo su sueño de estar con Antoshka en privado aunque fueron sólo treinta minutos, y aún así, la persona que lo estuvo complaciendo quizás no era quién realmente esperaba.

Mierda, esto lo tenía por los huevos, estaba demasiado confundido entre dos mundos. Dos personas totalmente distintas.

No, imposible. Steve no puede gustar de Tony, tampoco se conocen demasiado, y el castaño es demasiado cerrado como para permitir que se conozcan.

Dios, qué dilema.

¿Cómo una noche tan fenomenal que alborotó sus hormonas y su corazón puede terminar así de confusa?

Se dio una vuelta en la cama, mirando su abrigo sobre su silla, y apretó sus labios.

¿Él gustar de Tony?, qué locura.

○○○○

qué hubo genteee. saluditos x aquí, les escribo esta nota porque el próximo lunes no habrá capítulo. me estoy mudando y tendré poquito tiempo, pero quizás actualice el miércoles de la siguiente semana o algo así.

espero les haya gustado. bai<3