La propuesta de un... ¿Caballero? | LEGADO #1 ✔️

🔸Capítulo 4🔸

LA PROPUESTA

Mágicamente este día amanecí de mucho mejor humor, ya no hay rastro de dolor en mi cabeza, eso significa no más Erick.

Y fuera de los tres caballeros que ayer vinieron a visitarme y dejar flores caras, y fuera de tener que escucharlos alardear de sus títulos, caballos, terrenos y negocios....

Puedo decir que me divertí mucho. No sabía que escucharlos hablar como tontos intentando llamar mi interés sería tan divertido. Divertido en el sentido de que nunca tendrán ni la mínima idea de cómo llamar mi atención. Claro que mi cara no podía ser por completo expresiva, pero me las arregle para disfrutar el momento.

—Vi, alguno de estos caballeros ha llamado tu atención? —preguntó mi madre cuando ellos se habían ido.
Reprimí mis ganas de poner los ojos en blanco. Mi madre no tiene la culpa, soy yo la que nunca le he expresado mis sentimientos.

—John Lukas es muy apuesto, madre, pero honestamente sus ojos me dan miedo. —me confesé con ella, después de todo es mi madre y por el momento la única mujer en la que puedo confiar, la abuela ya es mayor y sé que estos temas son muy delicados para ella.
Y mis tías, tienen a sus propias hijas de las que preocuparse.

—eres muy observadora Vi. También lo noté. Pero aún es muy pronto para tomar una decisión. Estoy segura de que cuando conozcas al indicado, lo sabrás.

—tú lo supiste con mi papá? —le pregunté sin pensarlo. Me di cuenta del error cuando mis palabras ya habían salido de mi boca.

La cara de mi madre primero fue de sorpresa, después agachó su cabeza y simuló una sonrisa.

—no tienes que recordarlo. Perdona mi imprudencia madre —me adelanté a su respuesta.

—No pidas perdón querida. —levantó su vista hasta encontrarse con mis ojos, puedo notar que no muchas veces me mira a los ojos. Sé la razón. Pero en ese momento lo hizo. Inspiró profundo —la verdad es que no. Cuando conocí a tu padre yo era solo una niña y pocas veces coincidimos, pero después de mi segunda temporada en el mercado nos hicimos buenos amigos. —sonrió y se sonrojó —yo fui la que tenía la intención de enamorarlo —niega con la cabeza —no tenía ni idea de lo que tenía que hacer, pero la noche del baile de compromiso de tu tía Franie, que por cierto fue un baile de máscaras, fui honesta conmigo misma y eso fue suficiente. Tu padre me encontró y le gusté. Me pidió matrimonio esa noche. —me contó su historia con mi padre. Yo la conozco, la leí unas seis veces a escondidas. Pero escucharlo de ella fue diferente. Se sintió real.

—como lo supo él? Que tú eras la indicada —pregunté acercándome más a ella.

—pues tu papá lo describió como un rayo que le atravesó el cuerpo entero, una corriente eléctrica que lo cambió, haciendo que todo lo que era a blanco y negro tuviera color.

Sonrío con una mano sobre la de ella. —gracias mamá.  —Sus ojos siguen en los míos, siento como traga.

—no te conformes con menos Vi. —me dijo con una enorme sonrisa.

Agachó mi cabeza, me sentí abrumada.

—que pasa Vi, hay algo que querías compartir conmigo? —me preguntó y creo que si espero, tal vez no tenga otra oportunidad.