La propuesta de un... ¿Caballero? | LEGADO #1 ✔️

🔸capítulo 15🔸

DESPUES DEL BESO

Dos días son poco a lo que realmente necesito para recuperarme del impacto de lo que realmente es Erick.
Siempre lo supe desde el día en que lo mire por primera vez... lo he visto ser un libertino en muchas ocasiones, pero conmigo era exigente y profesional. Confié en él. Confié en el hombre que me dio un rayo de esperanza. Y me beso.
Ahora siento que pedir más que solo mi primer beso con él.

Estoy acostada en mi cama como lo he estado los últimos dos días. No escucho cuando tocan a mi puerta solo salgo de mis pensamientos cuando mi hermano Colin hunde el colchón a mi lado.

Espero que solo me haga compañía porque es difícil hacerlo hablar la mayoría del tiempo, pero me sorprende cuando no pasan ni dos minutos cuando abre la boca.

—crees que el primer beso para una señorita es importante?

¿Mierda me vio? Estoy muerta.

No sé cómo, pero logro controlar mi tono de voz para contestar.

—yo creo que sí. ¿Por qué lo preguntas? —mierda si me descubrió tendré que comprar su silencio.

—por nada, olvídalo. —que? ¿Qué lo olvide? Esto no es por mí ¿o si?

—Colin... besaste a alguien? —me atrevo y le pregunto.

—no. Pero quiero hacerlo.

—por Dios Colin —me siento en la cama por la sorpresa.

Mi hermano se encoge de hombros.
—olvídalo no puedo hacerlo. En unos meses me voy al colegio y ella aún no está en sociedad.

—pero...
—gran charla hermana —dice cuando se levanta de mi cama y camina hacia la puerta para desaparecer.

Aún con la boca abierta lo miro irse de mi habitación. Colin me dio lo suficiente para olvidarme de mi mierda.

Pero la puerta se abre de nuevo y ahora es mi madre.
—Vi. Que bueno que te sientes mejor. Tenemos visita, deberías arreglarte un poco y bajar a saludar.

Sí, me siento mejor pero no esto mejor.
—quien es? —cualquiera menos Erick por favor.

—el conde Edward querida, y no se irá hasta que pueda saludarte. También llegaron flores de parte de Erick deseando que te mejores pronto.

Por qué la sola mención de su nombre me hace retorcer el estómago?
Con mi cara más amable asiento con la cabeza.
—bajaré en un momento madre.

***

No me toma mucho tiempo ponerme un vestido decente y arreglar mi cabello. Bajo las escaleras y escucho accidentalmente un poco de la conversación.
Solo hablan de tierras y negocios. Aburrido.

Entro en la sala de estar y encuentro a mi madre y padre con el Conde Edward. Hoy se mira un poco más mayor que la primera vez. Ahora si noto sus rasgos cansados. Es muy apuesto, pero aun así las labras de Erick retumban en mi mente.

"Tu pensamiento es tan hermoso, pero te aseguro que ninguno de estos hombres te darán esa libertad. Qué hombre abandonará su posición o la pondría en pausa para hacer que su hermosa y noble esposa cumpla con una misión de vida que le llena el alma y la hace ser tan única diferente y especial.?"

El conde tiene una vida, y un título. Odio aceptar que Erick tenga razón.

—buen día, Señorita Violet. Ha iluminado este lugar con su presencia. —el conde se acerca hasta mí y tomando mi mano deposita un beso en mis nudillos.