𝑳𝒂 𝒎𝒆𝒏𝒕𝒊𝒓𝒂 𝒑𝒆𝒓𝒇𝒆𝒄𝒕𝒂 [𝒀𝒊𝒛𝒉𝒂𝒏]

20

Segundos: Dos meses más tarde. 

Pov. Wang Yibo. 

Xiao Zhan parecía otro desde la noticia de que traía cachorros, su amor por Wang Yibo aumentaba cada vez más, y aunque las órdenes del doctor fueron muy claras, por tantos cuidados que este necesitara no dejaba de hacer cosas tontas, todas las noches cuando Wang Yibo se dormía por el cargue enorme que llevaba sobre sus hombros, su omega se dirigía a la pequeña habitación vacía que quería para sus hijos, era pequeña pero inmensa para dos bebés, tenía tantas ideas en mente, quería decorarla entre rosa y azul, podían ser dos cachorros del mismo sexo o tal vez sexos diferentes, solo faltaban semanas para saber sobre los sexos de sus bebés. Estaba tan feliz con la idea de ser padre una vez más, que no pegaba ojo en las noches.

—  Eso no es bueno para tu estado, Xiao Zhan. 

Se sobresaltó al escuchar la voz dominante de Wang Yibo, fue hasta él lo abrazó por la espada, su pancita estaba redondita, bastante crecidita, el tiempo había pasado en un chasquido de dedos, tantos planes por cumplir y aún no se llevaba ninguno a cabo. Xiao Zhan quería casarse antes de que los cachorros nacieran, pero le había había imposible. No podía usar pantalones ajustados mucho menos una camisa que le entorpeciera, por eso decidieron posponerla un poco más, al menos hasta que los cachorros nacieran. 

—  Amor, me asustaste. Pero estoy bien, puedo hacerlo, cuando estaba esperando a Jojo yo solo preparé su habitación. 

Xiao Zhan se echó a reír como tonto aferrado a los brazos de Wang Yibo, pero él tenía razón, se estaba sobrecargado mucho, así que se dejó llevar por él hacía él dormitorio que ocupaban, cuando Wang Yibo lo ayudó a acomodarse en la cama puso las sábanas sobre su cuerpo, casi fue tan exagerado que tapó su rostro.

— ¿Crees que me veo muy gordo? 

— No Xiao Zhan, te ves muy tierno, puedes por favor dormir, mañana contrataremos a un decorador de habitaciones, puedes elegir lo que desees pero mañana. 

Wang Yibo apagó su lámpara de noche. Cuando pensó que todo estaría tranquilo y que Xiao Zhan podría dormirse de una vez, fue todo lo contrario, se giró hasta quedar abrazado a su espalda, Wang Yibo abrió los ojos cuando sintió la abultada panza de Xiao Zhan pegada a él, no pudo evitar echarse a reír, se veía tan tierno en su estado, pero en realidad parecía un pequeño balón de fútbol todo inflado. Se hizo el dormido cuando el mayor comenzó a hablar.

— Quiero que sea una decoradora de interiores, y que sea alfa, no quiero que se fijen en ti o que me termines dejando sólo y embarazado. 

Ahora mismo sus hormonas revolucionadas lo estaban obligando a decir cosas sin sentido, Wang Yibo jamás abandonaría a Xiao Zhan por nada ni nadie en el mundo, no existía ese algo que le hiciese cambiar de opinión sobre compartir una vida a su lado, ambos estaban destinados, no solo lo había anudado o embarazado, estaban enlazados para toda la vida, no tendría corazón para hacer algo tan ruin como eso porque los amaba mucho a los cuatro, ellos son su familia ahora, la familia perfecta que siempre quiso tener. Escuchó que Xiao Zhan absorbió sus mocos, no podía creer que en realidad dudara de él, se giró hasta quedar frente a frente con su omega, Wang Yibo sonrió besando sus ojos húmedos por las lágrimas. 

—  No sabía que el omega dominante de 30 años e importante empresario Xiao Zhan podía ser tan susceptible. 

Se burló de él con ternura.

—  Es el embarazo, me hace parecer un llorón. 

Wang Yibo lo atrajo a su cuerpo con cuidado de no lastimarlo, besó sus labios, sus mejillas, su mentón y luego regresó a sus ojos. Amaba tanto a ese omega.

— Escucha amor, nosotros estamos unidos para toda la vida y cuando nuestros dedos tengan al fin esas alianzas, lo estaremos mucho más, seremos la familia perfecta, con tres hijos preciosos una casa enorme y un perro. 

Wang Yibo hizo reír a Xiao Zhan por sus ocurrencias. Ese era su objetivo, hacerlo reír aunque fuese gracias a sus tonterías. 

—  Quiero que mis hijos se parezcan a su padre, Jojo es tan lindo porque se parece tanto a ti.

Wang Yibo besó la punta de su nariz.

—  Yo quiero que mis hijos sean como su padre omega, hermosos, tan hermosos que todos los envidien y Jojo es perfecto porqué tú lo eres. 

Xiao Zhan hizo un puchero bien acurrucado en el pecho de Wang Yibo.

—  Te amo Wang Yibo, te amo como nunca he amado a nadie. 

Wang Yibo apretó los labios para evitar reír en frente de Xiao Zhan, el tema del embarazo si que lo había convertido en alguien muy cursi, ya sabía cuanto su omega podía amarlo ya que él lo estaba amando de la misma manera, pero sabía que Xiao Zhan nunca había tenido una relación con otro alfa antes, al menos no una duradera donde llegara a enamorarse, así que esa frase le causó gracia, por otro lado Wang Yibo tampoco había hecho posesión de un omega, no había sentido amor o compromiso hacia otro.

—  Yo también te amo Xiao Zhan, mucho. 

—  Quiero que nos casemos Wang Yibo, antes del nacimiento de los cachorros. 

Esta vez Wang Yibo no pudo esconder sus feromonas, las liberó completamente inundando la habitación con ellas, se trataba de amor, felicidad, tantos sentimientos juntos que no podía esconder. Xiao Zhan lo estaba haciendo muy feliz, lo había convertido en el alfa más feliz del mundo y sin darse cuenta, era la primera vez que liberaba sus verdaderas feromonas, antes Xiao Zhan solo podía sentir la de su lobo interior, que a pesar de no disgustarle no estaban siendo lo mismo, por eso tener las feromonas de su alfa, las verdaderas, era como viajar a otro lugar, se abrazó tan fuerte a Wang Yibo que ambos sintieron las patadas de los cachorros hacerse presente entre ellos.

— Ufff, creo que se sienten presionados. 

Ambos se echaron a reír. 

— Xiao Zhan, ¿Estás seguro de que no quieres esperar a que ellos nazcan?

Preguntó Wang Yibo sobando su pancita.

— No puedo esperar más Wang Yibo, quiero llevar tu anillo en mi dedo, hablar de ti y referirme a mi esposo, vamos a casarnos, quiero hacerlo. 

—  Entonces deben ser dos testigos, no podemos perder tiempo, cuando los cachorros nazcan entonces podemos tener una boda más grande. 

— Lo que tu quieras. 

— ¿Sí? 

— Umju sí, hagamoslo.

— Papi ¿Puedo dormir con ustedes?

De pronto una pequeña voz proveniente de la puerta los hizo mirar curiosos, sonrieron enamorados cuando vieron al pequeño niño que tanto amaban con una cobija en una de sus manos.

— Ven aquí amor. 

Wang Yibo abrió sus brazos para recibirlo en ellos, Jojo sonrió sintiendo los labios del alfa en su mejilla que no dejaban de hacerle cosquillas, una vez en la cama se acostó justo en el medio de sus padres que comenzaban a jugar con sus cabellos. 

— ¿Puedo ponerle el nombre a mis hermanos?

Xiao Zhan sonrió mirando a Wang Yibo por la pregunta de su hijo. 

— Aun no sabemos sus sexos, pero si fueran varones ¿Qué nombre te gustaría?

Jojo puso cara pensativa, hasta que le dio una idea.

— Puede ser una unión de sus nombres, sería lindo. 

— Claro, pensaremos en eso.