Nosotros paseamos por el tiempo, coordinando ver a los lejos las estrellas,
pero las estrellas están lejos, tan lejos que se pierden en el infinito mar de luces,
visitándome cuando cierro los ojos y navego perdiendo los días de su existencia
en conjugaciones verbales próximas al verso de mi reposo.
No es mas, oh limeños, la ciudad una tenue y cálida esperanza de pasos;
no son vuestras voces, conexiones fragmentadas en lazos perdidos
y aunque estemos heridos, hemos hallado descanso en el eterno de Dios del cielo.
Sin embargo he posado la mirada en lo nublado de este atardecer
y no quisiera tener que ver perecer las olas y desfallecer
ataviado de crónicas fantasiosas en un contrito acorde,
acompasado de voces de armonizan, la balada de la noche.
Quedaré plasmado en vuestros escritos, oh poeta sin oficio,
y echaré vuestras hojas al firmamento y esparciré mi verso
entre tus pupilas amarillas y tus ojos rojos de sueño
y abrirás las ventanas de tu casa y respirarás mi prosa
y aunque no sea bueno en tu literatura e escrito con dulzura,
lo que he visto en tus pasos...
Nosotros paseamos por el tiempo, coordinando ver a los lejos las estrellas,
pero las estrellas están lejos, tan lejos....
¿Como sería si las aguas del mar mojaran las mentes y no los pies?
¿Como sería si el viento roce la garganta y no las mejillas?
y las ventanas del cielo miren, lo lejos de la ciudad?
como sería, como sería...
Apenas amanece el día y veo en su reflejo párpados en silencio
cobrando vida en la imaginación de aves trinar por la mañana.
¿Como sería si el final es el principio y lo pequeño grande en la inmensidad del firmamento?
Como sería si fuéramos pares en un mundo de impares y sumáramos para no restar... como sería, como sería.
