Parte 30: Lo que no se entiende, se entenderá

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Si yo volviese, oh "María Estela", a verte en aquella estación de febrero, cuando vuestro cumpleaños era la oportunidad de ser el primero en visitar tus manos para saludarte ante la enajenación de mi juventud, esa que en Lima se volvía rebelde, jamás hoy te hubiera lastimado, y llegaría a casa cada día de mi vida para abrazarte en mis poesías para hacerte feliz ante tanto dolor cercano de vuestras familias.

Si yo volviese, "María Estela", a verte saliendo de la academia le pediría a Dios una oportunidad y no volvería a dañar tu corazón herido y cuajado de tantas cuitas, y vuestras lágrimas secaría para no ofenderte más, amada mía.

Nuestros hijos no sufrirían en la angustia de su mentalidad y no permanecerían sentados esperándome tras la ventana...

El tiempo ha pasado y mi huesos se cansan, no se si sea tarde o temprano para volar al cielo o al infierno, pero me arrepiento de hacerte respirar mil veces y no darte mis ojos ante la adversidad.

Si yo volviese, "María Estela", a vendar el dolor de la casa, ella no lloraría cuando te veía sobre la cocina, mis ojos se nublan en la calle y no se ha donde ir, desvarío, nada me hubiese costado ser feliz contigo como aquella vez que te elegí.

!Que pérfido que soy! pero pido tabicar mis faroles ante tu rostro angelical, ese que se pierde del cansancio...

Yo no entendí y no te merezco, como aquella vez en la Lima del 85 salí de casa para verte una vez más... Si yo volviese, oh "María Estela ", a nacer de nuevo no te lastimaría como lo hice desde hace tiempo...

Al final de cada verso no me entenderás pero guardo tu distancia sobre mis bolsillos para entender lo que guardas sobre tu corazón agradecido; quisiera ser un hombre correcto y ser caballero, lo fui, lo pasé y morí ante mi irreflexión, si yo si yo... si yo.

Si yo volviese, oh "María Estela " a escribir sobre los papeles de mi verano, mi amor sobre ti no sería en vano, vosotros sois la mujer mas excelente del mundo, miserable de mi que te he perdido en mi omisión.


Yace inerte la deuda de una familia feliz, un abrazo fraterno y una lágrima en mi desvelo, el amor no es dinero, no es vivir sobre un techo.!Dios, he caído en la simpleza de la felonía, miserable de mi, miserable!

Yace inerte mi mundo marchito por mi causa...




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