Una cita con el cielo...las nubes están cargadas de lluvia de verano
una cita con el viento...pasean las hojas sobre mi ventana caminando
una cita con el mar...sentado sobre las piedritas y volver a caminar.
Sois el paisaje perpetuo y yo el farol de las estaciones...
Todos miran el cielo, todos miran el mar, pero hay una estrella que nos hace imaginar, el sol alumbrando en la oscuridad y vuestra voz en la navegando en la inmensidad...
Las estelas del firmamento caminar, las garúas del invierno sollozar...
En algún lugar del cielo, hay un espacio para vosotros y vosotros sois el tiempo fragmentado, aunque a veces unirlo hemos intentado, está esparcido en la letanía del viento,moviéndose en el sendero del inmenso firmamento...
como cada espacio sideral, emanando destellos de luces que cubren las gotas de vuestro espacio limeño, muriendo como la mañana para noche, tiritando de frío sobre el sol al mediodía...
Es como si Rizzo fuera Próceres y París fuera nuestra ciudad...
Es evidente que la lluvia en febrero es reflejo del brillo del sol sobre las aves, maquinando volar aun dispersadas por el viento del otoño que está por nacer.
He ansiado acelerar las horas del reloj para que nos visite su frío y su nublado parecer, más, me someto al inclemente sol, aunque mi mente sea otoño e invierno, poesía sobre sus veredas y faroles en su oscuridad...
Somos poesía del tiempo, somos estaciones del año, somos....
