Estaré en sentado en la vereda del firmamento, compartiendo saludos con el viento y abrazando el tiempo, el tiempo que se detiene ante el paso de tus pies, tan sutiles y abriles como el verano que se oculta sobre las páginas de un libro que se cerró.
Hoy comparten las aves entre las nubes, los sueños del invierno que feneció bajo la cálida fonética de tu voz, amarillo es el sol y azul el cielo que nos ocultó...
Es tan difícil entrar en vuestra gramática, que me pierdo en tu semántica. Es tan complejo resolver tus ecuaciones, que me pierdo en tus emociones. Es tan intrincado desencriptar tus códigos, que cierro las ventanas para respirar e irme al mar...
Tal vez prefiera irme al mar, y navegar hasta mas allá de las estrellas, donde solo la bulla del silencio me deja dormir y las estrellas no existen bajo la velada nublada de altamar...
Pero si subieras a mis pensamientos, me perdería en el néctar de tus sentimientos, cayendo dormido en la vereda del firmamento, no se si con frío o con dolor pero si con ojos cerrados de tanto amor, guardado en la gaveta de mi sensibilidad, esa que se guarda entre las llaves del infinito...
Oh! Si yo amada mía, volviese a mirar tu rostro con tal frenesí, moriría en el pensamiento sobre tus pies y despertaría en el jardín que le pedí a Dios me permita sembrar para vosotros.
Oh! Amada mía, dime que te pone triste cuando llega diciembre, dime que hay en mi para morir por amor, desligarme de lo que estorba...Nací para verte sobre mi regazo, nací para buscarte y, te he encontrado?
Oh! Princesa de colores, que llenas el mundo de candores, respira mi poesía cuando subas a esa torre, respira y cierra los ojos mientras palpita la inocencia que hay en ti. Oh! Amada del cielo, yo subo y me desvelo, tu bajas y descansas, brilla en ti la paz.
Si me pidieras, si fuera, si me pidieras, si fuera, me pidieras....iríamos, caminaríamos hasta el fin.
No se pierde la mañana por ser temprano, pero si la tarde por ser nocturna, pero yo quisiese perderme en la brisa del tiempo cuando atisbo tu sombra bajo la pared...
A veces quisiera caer en la noche de los sueños, y pasear como pasean las hojas tan tranquilas sobre la ciudad, pero no es de noche y no tengo sueño, veo que el sendero al campanario es tan lejos y veo que te pierdes como las luces cuando amanece. No soy el semblante de los acaudalados, ni devoto del derroche, pero si alguien que se pierde en la imaginación de la ventana de los sueños...
El misterio de volverte a ver, una fantasía lejana como la vuelta al mundo, el misterio de tocar tus palmas como ver la garúa con los lentes...El sueño de los que alucinan, la voz que desvarían.
Aguardan las voces, palpar la sinfonía de tu verano, como las golondrinas vuelan en buscan de su refugio, como cuando llueve y te escondes o cuando llueve y te dan su abrigo. Aguardan las voces, correr la carrera de la paciencia y dejar en mi conciencia la llave de tu esencia...
Lo que no se entiende, nunca se entenderá...