Capítulo 16. Nueva mansión.

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Rosella

− Querida, necesitare tu ayuda con algo. – dice mi madre entrando en mi habitación.

Christine y yo estamos terminando de preparar nuestras maletas para regresar a Oxfordshire hoy mismo, los chicos están en la habitación.

− ¿Qué pasa madre? – Christine hace un ademan de salir.

− Puedes quedarte Christine, − se gira hacia mí. − Stella está a nada de dar a luz, los hijos de Filippo no saben protegerse y Gianna me acaba de avisar que tiene un mes de embarazo, esto se está volviendo cada vez más peligroso, en especial para los niños, quiero que te lleves a algunos de tus hermanos a Oxfordshire, tú decides a quienes.

− Madre estaré en la Universidad la mayor parte del día.

− Lo sé, ellos igual irían a la escuela.

− ¿Y saliendo?

− Estoy pensando si contratar a alguien para que los cuide.

− Podrían quedarse en mi casa, mi nana puede cuidarlos. – comenta Christine.

− No podemos pedirte eso, amiga.

− No lo están haciendo, lo estoy ofreciendo.

Sonrió a mi amiga y mi madre le agradece.

− Entonces...

− Me llevare a los mellizos y a Lionetta, necesitaré alguien que la proteja si no estoy y jamás me perdonaría si no la llevo.

− Bien, haré que los inscriban y prepararé sus maletas.

Después de salir del hospital, mi madre me trajo a la mansión e insistió a Killian y Adrián para que se quedaran acá, les cedió la habitación de invitados que había estado usando Christine y ella se ha estado quedando conmigo en mi habitación, sin embargo, no he hecho más sugerencias, ya que ahora ella y Adrián son novios, mi madre nos estuvo permitiendo salir a algunos lados confiando en Adrián y en mí, Lía a veces nos acompañaba y en ocasiones cuando iba al hospital yo la cubría diciendo que estaba con nosotros, de momento ya estoy completamente recuperada, aunque aún tengo rencor contra los encargados del hospital por lo que paso.

− ¿Y si tus padres regresan a casa no habrá ningún problema?

− Mis padres no regresaron a casa en vacaciones, no lo harán pronto.

− ¿Maletas listas? – pregunta Adrián entrando en la habitación.

− Casi, pero igual tendremos que esperar para partir al aeropuerto. – respondo.

− ¿Por qué? – cuestiona Killian recargado en el marco de mi puerta.

Killian, el moretón de su mejilla ya casi no se nota, recuerdo como se lo hice y no puedo evitar recordar sus labios, gruesos y calientes mientras me besaba, su beso fue increíble, sabe besar bastante bien, Christine pone su mano en mi hombro sacándome de mis ensoñaciones.

− Antonella, Luka y Lionetta irán conmigo a Oxfordshire, para que estén más seguros.

− ¡Hemana! ¿es cieto que idé cotigo? – Lionetta entra en mi habitación corriendo y se apresura hasta abrazar mi pierna.

− Si pequeña, iras conmigo y mis amigos a Oxfordshire, también Luka y Antonella vendrán con nosotros.

− ¡Yei! Idé con mi hemana.

La cargo sentándola en la cama mientras me rio, veo que Christine y Adrián están sonriendo mientras Killian me mira con una sonrisa, pero a la vez con admiración como si jamás hubiera visto a alguien como yo, mi hermana me tira de la manga.

Lady Euro MafiosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora