Ramificaciones

Capítulo 25: Presentación

Naruto Uzumaki estaba teniendo un día regular. Lo más regular que podía tener considerando que seguía acostumbrándose a un brazo nuevo.

Los tratamientos de fisioterapia y las constantes citas médicas se habían convertido en su nueva rutina diaria. Era tedioso con su esfuerzo había progresando al punto que por fin podía sostener los palillos con suficiente fuerza para comer su ramen sin ayuda.

Por lo que disfrutando un tazón en Ichiraku con Sakura y Sai su día iba mejorando. Hasta que unos pasos rápidos se acercaron al lugar.

–¡Jamás adivinarán lo que vi!– exclamó Ino entrando de improviso al lugar. A este punto de sus vidas todos los de su generación sabían que si buscaban a Naruto el primer lugar al cual ir era Ichiraku. Ya prácticamente iban y venían de ahí como si fuera su casa.

–¿Una celebridad?– preguntó Sakura.

–¿Una nueva tienda?– se aventuró Sai.

–¿Otro lugar de ramen?– intentó Naruto.

–¡A Kakashi sensei con una mujer!– reveló Ino juntando las palmas emocionada. Los miembros del equipo siete se alzaron de hombros desinteresados y volvieron su atención al ramen, Ino bufó ofendida. –¿Qué les pasa?–

–Siempre que nos ilusionamos con que Kakashi sensei tenga una novia resulta ser otra cosa.– respondió Sakura con un suspiro.

–O está de guarda espaldas, o está dando indicaciones, o es una mujer espía de otra aldea.– masculló Naruto sin mucho ánimo.

–Iban tomados de la mano.– insistió Ino.

–Quizás era ciega.– justificó Sai.

–Sé muy bien lo que vi.– alegó Ino tomando asiento junto a ellos. –¿Tan poca fé le tienen al futuro romántico de Kakashi sensei?–

–Sí.– respondieron los otros tres al unísono.

Ino suspiró, incapaz de convencerlos, y pidió una orden de gyoza.

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La Hokage parpadeó incrédula al escuchar lo ocurrido durante la investigación sobre los Jashinistas. Tanto ella como los miembros del concejo estaban reunidos en la sala de juntas de la oficina para tan importante reporte.

Kazue estaba acostumbrada a comandar atención y realizar informes ante desconocidos, pero había algo que no reconocía en la tensión del lugar. Tsunade era una presencia reconfortante en su firmeza, pero de los otros dos ancianos no sabía qué pensar.

Kakashi y Kazue habían pasado por Shikamaru para ir a presentar el reporte completo. El joven Nara les dijo que dejó a Nozomi y su madre en uno de los campos de venados pertenecientes a su familia, por lo que estarían a salvo y con un empleo asegurado.

Aunque al principio a Shikamaru le sorprendió ver a Kazue en La Hoja, comprendió cuando le informaron del último intento de asesinato contra Kakashi.

La samurai pensó que la compañía de los dos ninja ayudaría a que los altos mandos estuvieran cómodos con ella, sin embargo sentía hostilidad por parte de ellos y no comprendía el por qué. Decidió pensar en eso después y enfocarse en buscar juntos una estrategia para el problema inmediato.

Era ahora Tsunade la que debía contemplar las opciones tras enterarse de todo y Kazue pudo ver en la mirada de incertidumbre de Kakashi que él no envidiaba esa posición. La que sería pronto su posición.

–Hicieron bien en venir aquí.– asintió Tsunade seriamente tras procesarlo –Si el General Honda ya tiene un blanco sobre Kakashi y los Jashinistas sobre la capitana Tachibana, entonces ninguno de ustedes puede seguir investigando en la capital.–