Después de asistir a todas mis asignaturas del día, vuelvo a la habitación, tomo una larga ducha y me voy al escritorio, tenía que escribir un ensayo para entregar al día siguiente.
Mientras escribía mi ensayo, la ventana del chat social se abrió emergente por la cantidad impronunciable de mensajes y llamadas que tenía nuevamente de Ryder... suspirando y sintiendo como mi corazón tamborileaba en mi pecho, decidí abrir su chat, solo para cerciorarme que seguía sin saber de mi existencia.
[...]
"Andy... me estás matando. Necesito saber de ti..."
"¿Crees que puedes deshacerte de mí como si fuese un puto objeto al que botas y ya? ¡Lamento desilusionarte, pero no lo harás! ¡No escaparás de mí!"
"Andy...solo dime que estás viva, por favor, estoy preocupado por ti, amor."
"Maldita sea, te amo"
"¡Eres una p...! ¿Cómo te atreves a dejarme? ¡A mí nadie me deja!"
"Andy, te estoy buscando. Y no descansaré hasta encontrarte..."
[...]
Mi boca se secó, mis manos comenzaron a sudar y temblar de miedo. ¿Qué me hizo creer alguna vez que él se cansaría de buscarme? Lo seguía haciendo... sus amenazas conseguían su objetivo, hacerme temblar de miedo.
Respire hondo y cerré mis ojos con fuerza, estaba a miles de kilómetros de distancia, si seguía manteniendo un perfil bajo, sin redes sociales, sin teléfono, jamás podría encontrarme, tenía que mantenerme como un fantasma, poca información de mí, nada que no fuese estrictamente importante.
Por un momento logró invadirme esa sensación desesperada de que él estaba vigilándome, tal como la vez que sabía todo lo que hacia porque instaló cámaras minis por toda mi habitación, cocina y salón de mi casa, o la vez que coloco un gps en mi bolso, sin contar que tenía rastreado el teléfono que solía usar en ese entonces... mi mente no dejaba de recordar todas las escenas parecidas que ya había vivido antes con Ryder, él no descansaría hasta encontrarme y las únicas preguntas que corrían por mi cabeza de lado a lado eran, ¿Cuánto tiempo tendría hasta que me encontrase? ¿Qué me hará cuando logre conseguirme? Estaba llena de pánico.
Si algo tenía claro, es que no podía estar sola, mientras compartiera habitación con Amelie dentro de una residencia llena de estudiantes, me sentiría un poco más segura y lejos de su alcance. Claro que, cuando se trataba de Ryder no existían los límites. Suspire con confusión, miedo, incertidumbre y pesar, la sensación intranquila nuevamente estaba aquí.
Amelie tenía clases hasta tarde según me había dicho, por lo que pasarían por mí en la noche para ir al departamento de los chicos. Así que estaría un par de horas más sola en esta habitación, sintiéndome expuesta y aterrorizada.
Apague mi laptop y la deje ahí en el escritorio, mi mente daba vueltas y la ansiedad me carcomía, me tire a mi cama y me metí debajo de las sábanas, me hice ovillo y me deje vencer por todo el cansancio y temor que embriagaba a mi cuerpo.
Me desperté de un grito ahogado cuando mi cuerpo inconsciente sentía que lo zarandeaban mientras decían mi nombre múltiples veces, al abrir mis ojos vi a Amelie, me miraba con preocupación.
—¿Qué carajos? ¿Por qué no estas lista? Jack espera abajo. —inquiere, la miro con los ojos muy abiertos y miro el reloj que no me había quitado en mi muñeca, eran las siete.
—Lo siento... me ganó el cansancio. —me excuse, me coloque de pie como un resorte y busque algo que ponerme, elegí unos vaqueros negros y un suéter sin cierre y con capucha en color azul que recitaba "Cambridge".
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Mi maravillosa destrucción.
Teen Fiction«Dos almas destinadas a encontrarse, sin saber que van destruirse...» Andy Millabur aprendió a sobrevivir a su hogar disfuncional, con un padre alcohólico, apostador y; con su madre adicta a la heroína. Desde pequeña fue sometida a diferentes tratam...