Después de un ataque de magia accidental cuando Harry tiene seis años, Vernon va demasiado lejos. Cuando Harry se despierta, está gravemente herido y tiene más de cincuenta años en el pasado en otro mundo. Después de algunos cambios, Harry termina e...
Luz de la luna, veo el brillo del sol blanco / Llegamos lejos y vamos suavemente
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Siguieron hasta Florean Fortescue y eligieron una mesa en el exterior. Hacía calor y un poco de brisa, el tiempo perfecto para tomar un helado al aire libre.
Greta fue la primera en llegar después de ellos. Rodeó a Harry con los brazos y este le devolvió el abrazo, necesitándolo más de lo que pensaba. Greta les preguntó sobre la guerra y Harry le contestó en fragmentos, dividido entre querer ser honesto y no querer preocuparla. Abraxas llegó poco después.
Entraron en la tienda. Harry y Tom pidieron un bombón de gloria para compartir, después de haberse gastado en la fotografía el dinero que habían destinado al helado. Podrían haber sacado más de su bolsa, pero no les pareció una pérdida real. La perspectiva de un helado era demasiado tentadora en aquel momento. Greta pidió un batido de chocolate y cerezas, mientras que Abraxas se decantó por el sorbete supremo, con cáscaras de hielo con sabor a fruta que formaban una intrincada flor arco iris.
Se sentaron fuera, tomando el sol, poniéndose al día. Los veranos de Abraxas y Greta habían sido envidiablemente tranquilos hasta el momento. Abraxas se entrenaba para una competición de equitación abraxana, mientras Greta se dedicaba a escribir y a practicar Quidditch. Astrid le envió saludos.
Después de que todos terminaran sus golosinas, deambularon por el Callejón Diagon, deteniéndose en cualquier tienda que llamara su interés. Entraron en Flourish y Blotts.
—Harry y yo estábamos pensando en encontrar un trabajo de verano aquí, en el Callejón Diagon —anunció Tom, hojeando las páginas de una biografía de Salazar Slytherin.
—La edad mínima para trabajar es de catorce años en el Mundo mágico —ofreció Abraxas.
—Curiosamente, es la misma edad en la Gran Bretaña muggle —replicó Tom, como la enciclopedia humana que era. —La Ley de la Infancia y la Juventud de 1933 así lo estableció.
—Eso es bastante reciente —dijo Harry, pensativo. —Estuvimos a punto de quedar atrapados en ella. Podrían habernos enviado a las fábricas, Tom.
Tom despeinó los rizos de Harry con una expresión cariñosa en el rostro.
—¿Hubo que esperar hasta 1933 para que los muggles prohibieran el trabajo infantil? —preguntó Abraxas, boquiabierto.
—En Gran Bretaña —dijo Tom encogiéndose de hombros. —No estoy seguro de otros países.
Abraxas abrió y cerró la boca.
—¿En qué tipo de trabajo estabas pensando? —preguntó Greta.
—No estábamos seguros —admitió Harry. —Supongo que los trabajos oficiales están descartados, ya que Tom y yo aún no tenemos catorce años.
—¿Podríamos tomar una poción de envejecimiento? —se preguntó Tom.
—La mayoría de los lugares usan una prueba mágica que puede ver a través de ella —dijo Abraxas.
