┃20┃PRIMER AÑO

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PRIMER AÑO

Dentro de luces heladas / Tus ojos estaban muy lejos / Los míos estaban empapados por la noche / Sígueme hasta los rayos de la mañana / Te seguiré hasta que la luz del día se desvanezca

Dentro de luces heladas / Tus ojos estaban muy lejos / Los míos estaban empapados por la noche / Sígueme hasta los rayos de la mañana / Te seguiré hasta que la luz del día se desvanezca

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El Expreso de Hogwarts era un sinuoso dragón rojo que echaba vapor por la nariz. Tom y Harry entraron en su interior, encontrando el primer compartimento vacío en el que sentarse. Dumbledore les había dicho cómo llegar al andén 9 ¾ después de que Harry le hubiera escrito al respecto. Hicieron flotar sus baúles hasta las estanterías.

—Eso sería wingardium leviosa, ¿verdad? —se preguntó Harry. —¿Si usáramos nuestras varitas?

Tom asintió.

Era extraño pensar que casi todo el mundo a su alrededor era mágico. Ambos se habían vestido con el uniforme de Santo James, pues no querían llevar túnicas en público de camino a la estación. Se alegraron al ver que la mayoría de la gente del andén había hecho lo mismo, aunque era fácil saber quién no sabía nada de moda muggle por algunas de las elecciones de atuendo.

Harry y Tom se sentaron en el mismo lado del compartimento, Harry tejiendo y Tom dibujando el Expreso de Hogwarts en su cuaderno. Lucy jugaba con algunos de los hilos de Harry en el suelo.

El tren partió, con el silbato chillando a modo de despedida.

Pasaron unos instantes hasta que se oyó un golpecito en el cristal.

—Toc, toc. ¿Qué tal, novatos de orígenes misteriosos?

Era Eileen Prince. Llevaba un largo vestido verde con un pañuelo atado a la cintura.

Harry la saludó con impaciencia, dándole la bienvenida al interior.

—¿Cómo te fue con el resto de las compras? —preguntó ella.

—Muy bien —dijo Harry, sonriendo. —Gracias de nuevo por todos tus consejos. ¿Y el tuyo?

Eileen asintió sin responder.

—¿Han pensado en qué Casa estarán? —preguntó.

—Slytherin —dijo Tom a la defensiva. —Los dos estaremos en Slytherin.

Eileen, para sorpresa de Tom, sonrió.

—Entonces estaremos en la misma casa. Eso me gustaría mucho. ¿Alguno de ustedes ha jugado alguna vez al Snap Explosivo?

Harry y Tom negaron con la cabeza.

—No es tan divertido como Gobstones, pero es más fácil jugar en un tren —dijo ella.

Repasó las reglas y jugaron un par de rondas.

—¡Esto es exasperante! —se quejó Tom después de perder otra partida. Lucy se había subido al banco acolchado y estaba acurrucado junto a Tom, pues no le gustaban las explosiones. —¿Pueden explotar cuando quieran?

Holly & YewDonde viven las historias. Descúbrelo ahora