Capítulo 43. Sleeping Beauty.

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Pov Benito

"Kendall está en coma"

Era la única frase que sonaba en mi cabeza una y otra y otra vez... Kendall estaba en coma. ¿Cómo podía ser eso posible?

Mi corazón se sentía completamente destrozado. No tenía ni idea de lo que podía hacer, me sentía perdido y confundido. Mi mente me decía que ir a verla sería lo mejor, pero mi corazón no estaba de acuerdo. No soportaba ver a Kendall así, en coma. No sabía qué hacer. ¿Debía ir? ¿Debía dejar de verla? ¿Cuál era la mejor opción?

Mis impulsos me decían que debía correr hasta el hospital para estar con ella pero mi parte lógica me hacía recordar que Kylie había mencionado que toda su familia estaba ahí y sabía que yo no era muy bievenido en el circulo familiar de Kendall.

Al carajo los demás, el amor de mi vida estaba inconsciente en la cama de un hospital, yo tenía que estar ahí. Colgué la llamada con Kylie y tomé la primera chaqueta que vi en mi sala para ponerme encima de la ropa que traía y salir disparado hasta el hospital donde estaba Kendall.

Mientras conducía hasta el hospital mis pensamientos iban dirigidos hacia ¿qué ocurrió? ¿Por qué está así? ¿Tendré la culpa? ¿Por qué no había estado yo ahí con ella para cuidarla?

Sentía un enorme sentimiento de culpabilidad por no haber estado ahí para Kendall y por la forma en la que estaban las cosas entre ella y yo antes que esto pasara. Existía una probabilidad de que Kendall no despertara de esto... y si eso pasaba, significaría que la última vez que la vi fue ese día que tuvimos esa enorme discusión y no pude despedirme de ella, ni decirle cuánto la amaba.

Sentía mucho coraje hacia mí mismo. Cuando llegué al hospital, todo era completa confusión. La familia de Kendall, algunos amigos cercanos de ella que yo apenas conocía e incluso uno que otro reportero merodeando la sala de urgencias, todo era un desorden. No quise entrar a la sala por la gran cantidad de gente, así que mientras, decidí subirme a la azotea del estacionamiento del hospital. Miré la ciudad entera sentado ahí, podía ver las luces de los autos de la ciudad a lo lejos. La ciudad entera se veía desde ahí y es cuando más vulnerable me sentí... Kendall no podía estar en coma.

Estaba pensando en lo mucho que quiero a Kendall, en todos los momentos que habíamos compartido juntos, en nuestras risas, en nuestras fiestas, en nuestros viajes juntos. Pero sobre todo, lo mucho que la necesitaba en mi vida, lo mucho que la necesitaba ahora. Y estaba a punto de perderla.

Esta era de esas ocasiones en la vida en la que frase de nunca irte sin arreglar las cosas con alguien porque no sabes si será la última vez que estás con esa persona, cobraba todo el sentido del mundo. Sentía que mi corazón me decía que tenía que verla, aunque no lo pudiera hacer legalmente porque aún estaba en la sala de emergencias.

Miré a través de la ventana y vi que la cantidad de personas dentro de la sala había disminuido. Así que me baje lentamente de la cornisa para entrar.

Cuando ingresé a la sala mi mirada se centró directamente en Kylie, quien estaba sentada sola en una silla de la sala de espera llorando y cuando me vio corrió hacia mí

-¡Benito!- dijo abrazándome y yo a ella, entonces las primeras lágrimas que me había esforzado en contener comenzaron a salir

-Ky, ¿qué sucedió?- le dije mirándola- ¿Cómo está Kendall?- le pregunté

Ella trató de articular una respuesta pero sólo pudo lograr sollozar y gemir, yo la miré y la abracé con fuerza. Ella intentó calmarse lo suficiente como para responderme.

-La... la ambulancia llegó con ella inconsciente y la ingresaron aquí. Kendall tuvo accidente mientras montaba a caballo y se cayó golpeándose la cabeza con una roca provocando un traumatismo craneoencefálico. .. el doctor dice que no tuvo daño en el tronco cerebral entonces eso puede indicar algo positivo pero dependerá de cómo reaccioné el cuerpo de Kendall con los días- contestó Kylie. Mi corazón estaba totalmente en shock...

The FalsehoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora