Capítulo 50. Mami be careful.

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Pov Benito

Después de mi intento de "secuestrar" a Kendall cuando salió del hospital, pensé que Kris me mandaria a desaparecer o quizá aparecería encerrado en un calabozo como había dicho mi hermano, pero la realidad es que nada de eso había pasado. Jomar y Bernie tampoco se habían metido en problemas por fingir ser un policía y un enfermero y sacar a una paciente del hospital.

Así que por ese lado, me sentía tranquilo... pero ahora había otra cosa que me quitaba el sueño, Kendall y el contrato. Aunque la familia Kardashian aún continuaba sin mandarme los papeles para firmar mi renuncia a dicho contrato, yo sabía que lo harían en cualquier momento y yo me rehusaba a firmar esos papeles porque no quería con Kendall y esa relación falsa era lo único que me mantenía a su lado.

La junta con su equipo de trabajo de Kendall y el mio tampoco había ocurrido. Suponía que la familia Kardashian estaba demasiado ocupada con el asunto de la recuperación de Kendall para pensar en estadísticas y asuntos que tengan que ver con Hollywood y por otro lado, a mí tampoco me había dejado poner un pie en la mansión.

Llevaba 4 días sin saber de Kendall. Ella me había bloqueado de todas sus redes sociales y de WhatsApp, Kylie estaba ocupada con sus sesiones para su marca de maquillaje  y ya no tenía a nadie que me mantuviera informado de qué sucedía en esa casa pero sobre todo, de cómo estaba mi princesa.

-¿Quieres más sancocho?- me preguntó Gabriela sacándome de mis pensamientos mientras ponía la olla con sopa a un lado mio en la mesa

-Estoy bien así- le dije esbozando una sonrisa

-Benito, no has comido bien los últimos días, además el sancocho es tu comida favorita- me dijo Gabriela reprendiendome como si fuera una buena mamá latina

-Sí, pero no estoy teniendo mucho apetito últimamente- le dije con un suspiro.

Gabriela me miró con una expresión preocupada.

-¿Hay algo que quieres decirme Benito?- me preguntó bastante seria

-Es Kendall- dije únicamente suspirando

-Sigues con eso- dijo Gabriela rodando los ojos- ya te dije que no vale la pena

-Es difícil dejarte ir cuando la has considerado tu mejor amiga, la persona más importante para ti, la mujer de tu vida... y al final de todo, sientes que ella nunca lo vio igual, nunca pensó en ti de la misma forma. Y sabes que ella no va a volver, pero te cuesta aceptar que solo estábamos jugando diferentes juegos- dije con nostalgia en mis palabras

-Bueno gracias, acabas de hacerme sentir como si el tiempo que tú y yo estuvimos juntos no significó nada para ti- dijo Gabriela con un tono de voz algo sarcástico

-No digo eso, y sabes muy bien que no es eso lo que pienso- le respondí con urgencia- Pero con Kendall sentí algo diferente, eso es imposible de explicar, es como si hubiera algo mágico que me hacía sentir vivo

-Fingire que no escuche eso último- dijo Gabriela rodando sus ojos nuevamente- pero te diré algo, ella nunca te dejó explicarle las cosas y es demasiado orgullosa para admitir que también se equivoco- dijo Gabriela con simpleza- además, ¿Quieres seguir siendo su perrito?- me preguntó alzando una ceja

-¿A qué te refieres?- le pregunté serio

-Me refiero a que le has dado todo tu tiempo, tu atención, todo tu amor, pero ella se aprovechó de todo eso y no le importa lo que haces. No le importa dar lo mismo de vuelta, no le importas realmente. No digo que ella sea mala, pero estoy segura de que nunca le importaste- contestó Gabriela de forma determinante

-Kendall me quiere... muy en el fondo- dije no tan seguro. Pero quería convencerme de que sí, de que lo nuestro podía resultar incluso con todos en contra. Gabriela rodó los ojos al escuchar mi comentario

The FalsehoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora