Capítulo 70. I go where she goes.

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Pov Benito

La cabeza me dolía horrible, había pasado casi toda la noche intentando conciliar el sueño y lagrimando por lo que había pasado con Kendall. Mi cerebro aún no procesaba la idea de lo que acababa de pasar y estaba casi seguro que nada de lo que me dijo lo sentía en verdad...

Sentí unos lenguetazos en la cara y giré a mi lado izquierdo para ver a Sansa treparse en mi cama y a Jomar entrando a mi habitación

-Hola brother, ¿cómo sigues?- dijo Jomar mirándome y entonces recordé que anoche había llegado lo suficientemente ebrio a mi departamento y en medio de mi borrachera me había puesto a llorar por Kendall, entonces Jomar tuvo que pasar 3 horas escuchandome hablar de Kendall una y otra vez

-Perdóname por anoche, no tenía control, la cabeza se me desbordaba y todo lo que sentía debía salir de alguna forma- le respondí, luego lo miré y vi que tenía un café en una mano y una bolsa de pan en la otra- ¿De dónde sacaste eso?- le pregunté confundido

-Tenía hambre y no tenias nada en tu freezer más que cerveza- me dijo dándole un mordisco a su dona- te traje algo igual por si tenías hambre

-Honestamente, no quiero ni existir- le dije. Sansa se había acurrucado a mi lado únicamente

-Vamos, la vida sigue con o sin ella- dijo mi mejor amigo tratando de animarme

-¿Cómo puedes decir eso? Ella era todo lo que tenía- le contesté mientras lo miraba fijamente en la cara

- Benito, no podemos controlar lo que siente o deja de sentir otra persona-  dijo Jomar mirándome a los ojos

-No pretendo controlarla... solo quiero que por una vez en la vida deje de pensar en lo que otros quieren y se dé la maldita oportunidad de ser feliz conmigo- dije quejándome

-Entiendo tu frustración, pero has de entender que sea cuál sea el motivo Kendall ya tomó su decisión y tienes que aceptarlo- dijo Jomar

-¡No quiero aceptarlo! ¡No quiero aceptar que ya no quiere estar conmigo! ¿Cómo puedo ir adelante sabiendo eso? ¿Cómo le pediré a mi corazón que empiece a olvidarla?- grité casi sin poder controlar mis sentimientos

-Porque no tienes más opción. Lo único que puedes hacer es enfocarte en ti, en tu propia felicidad como ella decidió enfocarse en la suya- contestó Jomar

-Pero ella lo prometió Jomar... hicimos una promesa de que no nos dejaríamos ir sin importar los demás- le dije

-Lo sé y entiendo tu desesperación, lo prometió, pero la promesa parece que ya no tiene sentido. Lo importante ahora es que no te rompas a ti mismo. Al final, ella parece ser muy clara en sus sentimientos- dijo Jomar- ¿qué es lo más importante?

Mi cabeza trataba de reflexionar las palabras de mi mejor amigo y de hacerme entender que quizá el tenia razón, pero por más que lo trataba no podía

¿Cómo le pides a alguien que simplemente se quite del corazón todo lo que siente de la noche a la mañana?
Talvez Kendall no iba a cumplir su promesa pero yo sí quería cumplirla hasta donde pudiera, yo no tenía miedo ni ya nada que perder.

Tomé la dona que mi amigo me daba y mientras le daba un mordisco, el timbre de mi departamento comenzó a sonar. Jomar y yo nos miramos

-A lo mejor son los muchachos, ayer se quedaron preocupados por ti- yo sonreí. Agradecía tener a unos amigos increíbles que a pesar de todo siempre estaban apoyándome de corazón. Con mucho esfuerzo me levanté de mi cama y baje con Jomar a abrir la puerta. Frente a nosotros estaba Gabriela vestida con su ropa deportiva, a lo mejor venía del gimnasio, pensé, pero ¿qué hacía aquí?

The FalsehoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora