La hermana de mi esposo

Viaje de negocios

Keller...

-Es imposible que le haya tenido que decir a mi esposo como prender un horno –Yo rio mientras miro unos papeles-- ¿tú no piensas descansar? Son la 1 de la mañana Caroline –Ella es la única que me puede decir así sin enfadarme--.

-Sabes que la junta más importante es de unas horas tengo que dejar todo listo –Ella bufa—.

-Llevamos dos semanas en este lugar y no has descansado una sola vez creo que tus ojeras se notan mucho más.

-Duérmete si quieres, pero yo tengo que terminar esto.

-No has comido bien, ni dormido bien, pensé que descansarías.

-Esto es un viaje de negocios.

-Si pero no todo es trabajo.

Katie tiene razón desde que llegamos me he descuidado un poco más pero este viaje es muy importante para unos equipos médicos nuevos para la empresa y unos convenios nuevos también.

********

Domingo hace dos semanas...

Dejamos a Katie con sus hijos en su casa y yo acabo de entrar a la mía, subo a mi habitación para darme una pequeña ducha pero al entrar veo la cuna de Selim la cual me trae muchos recuerdos, decido dejarla pasar mientras me ducho y me organizo. Salgo de la ducha y me coloco mi pijama con una bata encima, saco la ropa sucia que lleve a la finca para llevarla a lavar y cuando pongo a funcionar la lavadora subo nuevamente a mi habitación así recibiendo una llamada.

-Buenas noches.

-Buenas noches señora Keller, lamento llamarla a esta hora pero el departamento que usted eligió sufrió un pequeño daño, pero, tengo una casa que cumple con sus mismas expectativas.

-¿Una casa?

"No llevo ni una hora en la cuidad y ya hay problemas"

-Sé que no es lo que pidió pero estoy seguro que le encantara.

-Bien, necesito verla mañana mismo ya que el martes saldré de viaje y necesito que cuando vuelva de este ya este alojada en otro lugar.

-De acuerdo señora Keller, entonces mañana a las 10 de la mañana ¿le queda bien?

-Me parece bien, páseme la dirección y mañana hablamos –El asiente y cuelgo—.

Martes...

Me encuentro llegando al aeropuerto y como siempre hay paparazis, intento pasar entre ellos con Katie a mi lado y lo logramos después de unos minutos.

"¿Cómo carajos se enteran tan fácil?"

-¿Volviste? –Miro a Katie con el ceño fruncido mientras caminamos para el chek-in-- noto otra vez tú mismo humor de siempre.

-Estoy normal.

-¿Que? extrañas a tu amorcito –Giro mis ojos—.

-No empieces, no estoy de humor.

-Si ves, esa es la Caroline que conozco.

Continuo caminado después del chek-in hasta la sala de espera con la voz de Katie a mi lado hablando sobre Darya y todo lo sucedido el fin de semana, Katie es a la única personas que le tengo paciencia ya que esa es su forma de demostrar amor aunque su humor cambie cada 24/7 y tenga hambre todo el tiempo.

-¿Estas segura que tienes 27 años? –Le digo y ella hace silencio mientras estamos sentadas esperando—.

-Sí y dentro de 6 meses 28 ¿porque?