Paloma
Tristán me miro por un largo tiempo, no podía descifrar sus pensamientos.
De pronto sonrío de medio lado y sus ojos se iluminaron.
-Bien, si así lo quieres, así será - me dijo aun con esa sonrisa tan dulce y a la vez tan enigmática.
Ahora fui yo quien lo miro, me hizo sentir desconcertada.
-Amiga ya que no puedes dormir me quedare acompañarte.
-¿¡Que!? No, no es necesario.
-Por supuesto que si, para eso son los amigos. Apuesto que a Lu no le pedirías que se fuera.
-Tristán...
-Hazme un campo en tu cama, me voy acostar.
-¿¡Que!? ¡No! estas loco - podía ver como le divertía la situación.
-Bien, dormiré en el suelo - tendió la cobija, acomodo su almohada y se acostó. Yo lo veía sin saber que hacer o que decir.
-Buenas noches Ángel - me guiño un ojo y después los cerro.
No se por que, pero algo me decía que esto no iba a resultar como lo había pensado.
Recordé los días que habíamos pasado en el hotel, que fácil parecía todo entonces. Suspire.
De pronto Tristán se sentó y se quito la camisa.
-No te molesta ¿Cierto? acostumbro a dormir sin ella.
No pude responder, mis ojos viajaron involuntariamente a su dorso ¡Maldita sea! Por que lo tenia tan perfectamente marcado, pase saliva, como me gustaría tocarlo deslizar mis dedos por el y aspirar su aroma mezclado con su perfume que tanto me gusta y envuelven mis sentidos.
¡Concéntrate!
Me regañe mentalmente, lo mire al rostro y el muy maldito tenia su jodida sonrisa tan sexy, que me hace quedar embobada y contener la respiración ¡Malditas hormonas adolecentes! El aún sonriendo se volvió acostar, pero esta vez boca abajo. Ahora mis ojos viajaron por su espalda, siguiendo las líneas del tatuaje de las alas y los músculos que se le marcaban debajo de el. Un calor me invadió.
- ¿Segura que no quieres que vaya a la cama? - podía sentir en su voz la picardía.
¡Maldición! Me acosté y me cubrí la cara con la almohada, definitivamente esto ni iba ser nada fácil ¡Oh Dios! Soy virgen, y aunque no he tenido una relación de donde aprender, he leído mucho en los libros y se por donde va esto. Necesitaba un baño de agua fría.
Abrí los ojos y vi a través de la ventana que la luz del sol era intensa, con toda seguridad era muy tarde. De nuevo los recuerdos de lo sucedido me inundaron, primero la explosión, después los gritos la gente... sacudí la cabeza no quería recordar, una lagrima involuntaria rodo por mi mejilla.
De pronto recordé a Tristán y lo que habíamos hablado, me gire pero el ya no estaba en la habitación, sonreí y sacudí la cabeza, no definitivamente no me la pondría fácil.
Fui a la cocina, mi estomago reclamaba algo de alimento, me encontré a Lu sentado en la barra.
-Hola guapo.
-Hola princesa veo que dormiste muy bien. - lo fulmine con la mirada, por supuesto que entendía el doble sentido de sus palabras.
- ¿Y los demás? - pregunte.
-Fernando se fue, no sin antes hacerme prometer que estaría al pendiente y cualquier cosa llamaría.
-Ah.
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Angel de papel
Teen Fiction(Libro uno) Paloma o Mía como la llaman sus amigos es una joven de diecisiete años, la cual tiene muy claro que su unico modo de lograr algo en la vida es esforzandose mucho. Ella ya tiene sus vida planeada y definitivamente el amor no es parte de e...