Solo tenía algo de curiosidad, según me informaba Sebastián ellos se veían desde hace un tiempo. Cosa que yo jamás noté, no tenía idea de como no lo había notado si nos veíamos casi todos los días.El era silencioso.
Cuando llegamos a donde Sebastián me dijo que se juntaban siempre.
Era el hospital general para el pueblo, ósea que no era una cita romántica, pero este idiota me daba mala espina.
–¿Su majestad?
–Tal vez no me relaciono con mi gente, pero se que ese círculo de tinta china en la piel no es algo bueno.
–¿Eso es lo que tenia?
–Si, en la nuca. Lo vi cuando se estaban yendo.
Camine un poco más hasta que escuche la voz de Harry claramente desde adentro de unas habitaciones.
Por suerte los pasillos del hospital estaban vacíos, no tenía ningunas ganas de saludar a mis suplidos ahora.
–De tal regocijo, mis rodillas comienzan a doler en la agonía de una espera insistente a que los días en su ausencia termien, o mi lord, mi lord.
Era una cita del libro que estaba leyendo en la biblioteca el otro día.
Lo recordaba bien porque yo había tenido que leerlo en mi adolescencia.
Lo recitaba dramáticamente.
–Harry, ¿Pensaste en lo que te pregunté el otro día?
–Yo solo vine a leerles a los niños, si no vas a aportar, vete.
Tan sutil como siempre.
–Es que... no puedo estar en la misma habitación que tu, y no pelear por mis sentimientos.
Era obvio, este niñato estaba enamorado de Harry.
Pobre de el.
–La respuesta sigue siendo la misma, Nicholas. No estoy interesado.
Harry se aclara la garganta y sigue recitando su parte de la obra, en ese momento me planteé irme hasta que oí a Harry detener su lectura y unos golpes de tiro de la habitación.
Se oyó un grito.
Entré rápidamente, esperando ver a Harry en una situación no deseada, pero en cambio vi a Harry sobre el cuero de ese alfa, presionándo du cabeza contra el suelo.
–¡Ayuda!
Grito el alfa en el suelo, yo mire a Harry con duda.
El me miro de la misma forma.
–¿Que haces aquí?
Ambos preguntamos al mismo tiempo mientras el alfa forcejeaba bajo Harry. Este último se puse de pie y el alfa quedó en el suelo por el pie del omega en su espalda.
–¿Estabas espiando?
–¿Que paso aquí?
–Pasa que este imbecil, me robó un beso desprevenida mente por segunda vez. Le advertí que no lo hiciera de nuevo y lo hizo.
Dice con un gruñido bastante tierno.
Harry no tenia más fuerza que un alfa, solo teni estrategia para inmovilizarlos y rapidez para atacarlos.
–Dejalo ir, no volverás a verlo.
Harry Saco el pie de la espalda de este y el alfa se fue corriendo en ese instante.
–Alfas idiotas, les das tu amistad y se enamoran.
Toma el libro del suelo con cansancio.
–Ahora no tengo un Lord para los cachorros.
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Pincel rojo [L.S]
FanfictionEl Rey Tomlinson nunca se imaginó cuán caro iba a ser el precio de su placer, cuando las pinturas de un pintor anonimo lo convirtieron en el rey de la lujuria. -Pintarás para mi. Tampoco sabía que esa acción dejaría entrar a su vida a la persona más...