Era el momento, me sentía nerviosa, no sabía cuánto tiempo había visto la puerta de la mueblería desde la ventana de mi auto, no sabía ni siquiera qué haríamos o si me vestía de manera correcta para la ocasión, después de mucha indecisión bajé de mi auto y entré, Elizabeth estaba en el mostrador, alzó la mirada y me sonrió con la calidez que la caracterizaba a parte de ese brillo único en la mirada.
– Buenas noches, Scarlett – Saludó, la había visto estacionarse afuera de su tienda hace un rato, pero no entendía porque ella no entraba a la mueblería
– Buenas noches – Sonrió ligeramente, Elizabeth llevaba ropa casual, unos shorts y una camiseta de tirantes
– Déjame cerrar la tienda y empezamos... – Sonrió acercándose a la puerta – Ponte cómoda mientras tanto – Ofreció una de las salas de muestra
– Gracias – La siguió a dónde le indicó, Scarlett llevaba un vestido casual color cereza
Elizabeth no podía dejar de verla de reojo, mordía su labio inferior viendo lo linda que se había vestido, claro que para lo que harían esa noche no creía que sea lo más funcional.
– Bien... ¿Lista? – Escuchó Scarlett viendo a Elizabeth pararse enfrente suyo
– Sí – Se levantó – ¿A dónde iremos? – Ajustó su bolso
Elizabeth mordió su labio inferior – Sígueme – Empezó a caminar de espaldas
– Okay – Emitió animada dejándose guiar por esos ojos verdes que la veían de manera traviesa, no dejaba de sonreír
Scarlett caminó viendo alrededor, estaban en la oficina, no evitó sentir calor al estar en ese lugar, aún pensaba en esa noche, desde que volvió a verla su recuerdo más cercano de tocarla y besarla, sentirla como suya había sucedido en esa oficina, pero Elizabeth no se detuvo ahí, si no que caminó a la puerta trasera, no se había dado cuenta de que estaba ahí la última vez que fue.
– Te tengo una sorpresa... – Mordió su labio inferior viendo a Scarlett y apoyándose en la puerta
– ¿La puerta trasera de la mueblería? – Rio levemente
– No... – Se apartó – Tienes que cerrar los ojos ¿De acuerdo?
– De acuerdo – Rio levemente
– Okay – Se puso detrás suyo tapándole los ojos por más que los tenía cerrados, abrió la puerta y entró con ella a la siguiente habitación
Scarlett sintió que la mano de Elizabeth dejó sus ojos, pero aún no los abrió.
– Ábrelos – Pidió con emoción
– ¿Qué es esto? – Abrió los ojos confundida no entendía lo que veía
– Es el taller... obvio que ya no se usa para la mueblería, cuando mis papás empezaron este negocio tenían sólo la tienda y su taller, ellos hacían cada mueble a mano, se sigue haciendo así, pero en la fábrica con mejor y más grande maquinaria... – Llevó ambas manos a su cabello haciendo una cola alta – Te traje aquí porque vamos a hacer uno de tus muebles
– ¿Qué? – Emitió confundida
– Eso... vas a aprender a cortar la madera, lijarla, compactarla con clavos y pegamento, ponerle el relleno y el tapiz – Sonrió – Haremos el más pequeño... claro que si no te gusta la idea podemos sólo ir a comer o...
– Me encanta – La detuvo acercándose a ella – No sé si nos lleve horas o toda la noche, pero quiero estar aquí – Asintió emocionada
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Trouvaille | Scarzzie
FanfictionA mi esposa le va a encantar esta historia, nuestra historia.