Trouvaille | Scarzzie

45. ¿Cómo llegó eso ahí?

Scarlett tenía a Liana en brazos, entraban a una conferencia de prensa por su nuevo libro, a la pequeña le gustaba acompañarla a esas actividades, tenían comida deliciosa y también la consentían mucho, pero la ponía tremendamente nerviosa la entrada con todos los fotógrafos afuera, así que ella se abrazaba a Scarlett con fuerza queriendo entrar lo más rápido posible.

Elizabeth tenía tomada a su novia de la cintura, ni bien bajaron del auto, a pesar de estar detrás de las rejillas sentía todos los flashes en la cara, ambas llevaban lentes de sol, Scarlett cubría el rostro de Liana con una mano mientras sentía cómo se aferraba a ella, por fin llegaron a la entrada y pudieron ingresar al edificio.

– ¿Todo bien, Li? – Preguntó Scarlett viendo a la pequeña

– Sí, gracias – Sonrió viendo alrededor

– Señorita Johansson, le preparamos su camerino para que espere a la conferencia – Dijo un chico del staff

– Gracias – Sonrió tomando a Elizabeth de la mano y caminando a dónde la dirigían

Veía cómo Scarlett le sonreía a Liana y le ofrecía confort, le encantaba verlas juntas, no sentía que podía soportar más con el anillo en su bolso, debía pedirle que sea su esposa.

– ¡Qué rico! ¡Dulces! – Exclamó Liana mientras la bajaban al piso

– No muchos, Liana... que tú sueles excederte con los dulces – Advirtió Elizabeth con seriedad rodeando los brazos en la cintura de su novia

– Te amo – Susurró Scarlett besando sus labios

– Te amo – Sonrió volviendo a besarla

Caminaron juntas al sofá, a Elizabeth le gustaba tenerla en sus piernas mientras esperaban, así que así se quedaron, Scarlett sentía los brazos de su novia rodear su cintura compartían suaves besos, su día a día era un sueño.

Scarlett tomó unas uvas y empezó a dárselas a su novia en la boca, era un día muy relajado.

– Li, me avisaron que la editorial te tenía un regalo

– ¿A mí? – Dijo con la boca llena de dulces

– A ti, cariño... – Scarlett rio con suavidad – Está debajo de la mesa

Elizabeth sintió los besos de su novia en su mejilla, ella la abrazó queriendo besar sus labios, le encantaba pasar esos momentos juntas, sentía cómo correspondía sus besos, se alejó un poco para que ambas vean a Liana que abría la caja que le habían dejado.

Scarlett sabía lo que contenía, pero se sorprendía junto a ella y Lizzie, a parte de dulces, tenía un diario y un bolígrafo; pues gracias a ver a Scarlett ella insistía en que también quería escribir, sobretodo porque tanto ella como Elizabeth le negaban leer las historias que escribía, pues no eran para una niña de su edad, Scarlett se planteó en poder hacer alguna historia para niños, sólo para Liana.

– ¡Muchas gracias! – La pequeña se acercó a abrazar a su hermana y a Scarlett – Me gusta mucho

– Me alegro, mi corazón – Sonrió Elizabeth acariciando el cabello de su hermana menor

– Si escribo una historia ¿La vas a leer? – Le preguntó a Scarlett

– Claro que sí, cariño – Sonrió abrazándola a ella, creía que el regalo era más especial y emocionante para Scarlett que para Liana

La vida estaba siendo muy buena y tranquila, habían momentos en los que por Liana dormían tarde o tenían que ocuparse en actividades de su escuela, pero habían llevado bien la situación, pasaron un poco más de medio año viviendo en su nueva casa y podían con todo.