Trouvaille | Scarzzie

12. Caí

Estiró la mano aún algo dormida, entreabrió los ojos al no sentir el cuerpo de Elizabeth a su lado, recordó que llegaron a la habitación entre besos, se deshicieron de su ropa y se quedaron dormidas, escuchó la ducha, sonrió sabiendo que era ella, así que se escabulló al baño, abrió la cortina entrando detrás de ella.

– ¿Me puedo unir? – Preguntó tomándola por la cintura besando sus hombros

– Ya estoy por salir, de hecho... – Se cruzó de brazos

– ¿Sigues enojada, Lizzie? – Se asomó por su hombro besando su mejilla dejando que el agua las recorra a ambas – Tenemos todo el día juntas... ¿Quieres que te consienta aún más? – Susurró

– Tal vez cuando salga del baño – Se encogió de hombros

– Lizzie, por favor, déjame ducharme contigo – Apartó su cabello hacia un lado y empezó a besar su cuello – Por favor...

A pesar de que aparentaba molestia con Scarlett, estaba consciente de que era un juego y a la vez no podía resistirse a ella.

– Me hiciste sentir muy feo anoche, Scar – Hizo la voz más dulce que pudo y volteó a verla juntando sus labios a los de ella

– Lo siento, preciosa... – Susurró en su oído dejándole besos

– ¿Me vas a lavar el cabello y a enjabonar mi cuerpo? – Preguntó con el mismo tono de voz

– Sí, Lizzie, voy a consentirte... – La abrazó más a ella – Pero antes...

– ¿Antes? – Alzó una ceja volteando en sus brazos

– Antes... – Se acercó a besarla

Paseó las manos por su cuerpo, mientras la acercaba a ella, era una mujer tan preciosa, adoraba tenerla entre sus brazos, tan cerca, probar su boca, sentía su lengua en un beso profundo, bajó sus labios a su cuello y empezó a mordisquearlo.

Elizabeth enredó la mano en el cabello de Scarlett mientras sentía sus manos por su cuerpo, su espalda tocó la pared, sintió el frío de las baldosas, jadeó mordiendo su labio inferior, sentía bajar la boca de Scarlett por sus pechos, su abdomen, su vientre bajo, la mirada que le dirigía se le hacía sentido iba a evitarlo, pero cuando sintió su lengua en su intimidad no pudo hacer más que gemir y abrir las piernas mejor para ella.

Adoraba sus orales, el sexo con ella era increíble y el de reconciliación sólo potenciaba más las emociones que tenía, gemía aunque intentaba contenerse, tampoco quería decir su nombre, porque sabía lo que le encantaba.

– Mmmm... ahhhh... – Suspiró sintiendo como su orgasmo se liberaba en la boca de Scarlett, trató de sobreponerse mientras sentía sus besos subir por su cuerpo

– ¿Quieres que sigamos con esto en la habitación? – Susurró entre besos

– No – Hizo un puchero mientras acariciaba la cabeza de Scarlett entre su cabello – Vamos a bañarnos ahora sí, ponme el shampoo, por favor, Scar

– Mi Lizzie hermosa... – Mordió su mejilla con suavidad – Me encantas demasiado como para negarte algo

– ¿Más que tu amiguita? – Dijo mientras Scarlett se agachaba por el shampoo y se lo ponía en el cabello

– Más que cualquiera en el mundo, eres preciosa – Suspiró mientras hacía espuma en su cabello

Elizabeth rodó los ojos de manera juguetona, pero aceptó todos los besos que le daba y se dejaba hacer mientras también enjabonaba el cuerpo de Scarlett, tocarla era su propio placer, así que no iba a negarse tampoco.