contrato entre hielo ✔️

20: una historia de amor

36 años antes:

La academia U.A, una institución en la cual prospectos de héroes han salido a relucir sus capacidades tanto intelectuales y físicas a la sociedad superhumana. En ella han ido a parar una de las familias más influyentes de todo Japón, una de ellas conocida por crear a héroes de gran pronombre, como lo es "Endeavor", el héroe infernó.

Pero a la par también yace una "leyenda" entre estudiantes, él es conocido como "Dragon Flame", el alumno estrella en compañía de Enji Todoroki, Hisashi Shimura.

Dos rivales que siempre peleaban por todo tipo de recompensas, claro, uno era meticuloso, astuto e inteligente. Mientras el otro era impaciente y temperamental, dos actitudes que pondría en la balanza los logros de estos dos "titanes". El tiempo pasó y dos alumnas ingresaron a la academia.

Rei Hiromiya e Inko Midoriya eran dos grandes amigas que entraron a esta academia para cumplir su sueño, ser heroínas. Las dos poseían grandes poderes, uno más notorio que el otro, Hiromiya poseía la Kriogenesis y Midoriya la telekinesis, esta última era un tanto débil.

Con el pasar de las semanas ambas chicas se empezaron a adaptar a la nueva vida de estudiantes que llevaban.

A si como también pudieron conocer a los dos "reyes" de la escuela, Hisashi y Enji, en primera instancia a Inko realmente no le agradaba el pelinegro y no se diga del pelirrojo quien era mucho más coqueto que su amigo.

Esto no ocurrió con Rei, la cual quedó flechada por Shimura, claro, el chico era un tanto egocéntrico pero no a un grado de ser un patán, lo que si pasaba con Todoroki.

Con una gran expectativa Hiromiya se iba enamorando de Shimura. El chico era atento, sin dejar esa actitud egocéntrica, pero ello no la afectaba; más bien la hacía reír y sonreír por las payasadas y ocurrencias de ese joven.

Sin embargo, esa actitud lo presentaba con todas las chicas, la peliblanca sabía de antemano que el pelinegro sólo mostraba una actitud cordial y coqueta porque la veía como a una amiga a la cual avergonzar.

Pronto una desgracia llegó para la peliblanca, su amiga, Inko Midoriya era cortejada por su interés romántico, claro que la joven peliverde no hacía caso a sus oqueteos o regalos, lo cual hacía a Shimura no rendirse. Ese chico era bastante obstinado.

Su insistencia hartaba a la joven Midoriya, como también la hacía relucir una que otra risilla por las ocurrencias, ideas u tonterías que hacía para conquistar su corazón. Cuando por fin lo logró, logró domar ese duro e inquisitivo corazón, Hisashi Shimura conquisto a Inko Midoriya.

Pero sin saberlo otro estaba roto. Rei presenció con lágrimas en los ojos como su interés romántico le daba un beso en los labios a su amiga. Sin poder soportarlo salió corriendo desconsolada sin mirar atrás, escuchando la risa de inko y el regocijo del hombre del cual se había enamorado.

Pero las desgracias no acababan para la pobre chica , sus padres, dos personas con una avaricia extrema vendieron a su hija a uno de los hombres más egocéntricos y desagradables. Sí, fue degradada y lanzada a los brazos de Enji Todoroki.

El resto, ya lo conocen, así terminó una historia llena de amor inocente para empezar uno tóxico y denigrante.

Presente:

Tal historia era escuchada por tres personas, dos jóvenes y un adulto el cual estaba en la puerta con el rostro apoyado sobre la madera.

- Haber si entendí, tú, ¿te enamoraste de mi padre? - La peliblanca tenía lágrimas en sus ojos las cuales secaba con un pañuelo.

- Pero, Inko Midoriya, tu amiga y madre de Izuku conquisto el corazón del hombre del cual te enamoraste. - Completó la pelimixta.

Rei solo dio una sonrisa triste y asintió, ella sabía que no había vuelta atrás, esa pequeña fantasía e historia que siempre anhelo en sus sueños aún en las desgracias ya no podía cumplirse. Pues el corazón de su amado ya tenía dueña.

Los adolescentes se miraron y con un asentamiento de cabeza abrazaron a la mujer, quien terminó por derrumbarse. Sonoros llantos de dolor, angustia, furia y tristeza salieron de los labios de esa destrozada mujer. Quien solo deseaba... una historia de amor.

Hisashi quien escuchaba los llantos de esa mujer a la cual quería y amaba como a una hermana no sabia que hacer. Él amaba a su esposa, pero no le gustaba oír y ver quien era una joven risueña y llena de energía convertida en una mujer rota y mancillada por el pasado de un hombre avaricioso, aun estando muerto.

Justo en ese momento Inko, su mujer, observó a su marido sentado apoyando su espalda en la madera con la cabeza baja.

- ¿Hisashi? - Susurró con suavidad su esposa. El hombre levantó la cabeza y la vio a los ojos.

-Inko... ¿Qué hago? - Ambos escucharon los llantos de su amiga en el cuarto.

Marido y mujer se abrazaron soltando lágrimas como si ellos sintieran el dolor y desilusión de su amiga.

Aquello era una incrucijada para Shimura, si, ama a su esposa pero, oír llorar a su amiga de toda la vida le dolía, él no sabía sobre los sentimientos que ella tenía hacia su persona.

Esto era doloroso también para su esposa, escuchar lo destrozada y desilusionada que su amiga se encontraba le hacía añicos su corazón. Ella siempre tenía presente a esa chica de corazón bondadoso y sonrisa de niña.

¿Qué podían hacer para devolverle la alegría a esa mujer? que ya no tenía un motivo por el cual vivir. Pues su vida siempre fue jalada de las cuerdas.