Capítulo 2: Los diablos tientan

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(Lila)

Cuando volvimos a casa de la cafetería, Cilia contaba cosas maravillosas acerca de lo guapo que estaba el amigo de Caleb. No podíamos creer que actuara como una malvada en frente de él y en realidad muera por él.

Al entrar a la mansión fuimos a mi cuarto y continuamos hablando allí, fue una noche de chicas bastante alocada y bonita, Cici al fin había encontrado a alguien que había llamado su atención y quizás pudiera dar vuelta el mundo de mi amiga. Al apagar las luces y acurrucarnos en nuestras mantas finas de verano, pensaba en Caleb y en el momento en el que lo conocí, en el momento en que nos acercamos y en las cosas que sucedieron entre nosotros, y solo pensaba... ¡QUIERO VIVIR CON ÉL ETERNAMENTE!

También recordé que había escrito el libro "Etern Life" en la plataforma wattpad cuando iba al cuarto año de secundaria y que jamás me animé a mandarlo a cualquier editorial. Este libro fue mi salvación y luego comencé a pensar que sería bueno contar esta historia, pero más pintada al óleo y mejorada, Etern Life creo que fue un antes y un después para mí, sin embargo debo entrar a la universidad y nada será color de rosa. Mientras miraba la ventana del cuarto desde la cama mientras mis amigas dormían y le pedí a Dios que no me separara de Caleb, porque ya era suficiente el sufrimiento que había sentido, que quería ser feliz, aunque sea con este chico, porque lo amaba y lo quería como a nadie quise en este mundo.

(Thompson)

Aún tengo grabado en mi memora todo lo que ha sucedido en este último tiempo. Ese momento en el que le confesé a Lila lo que sentía y no ser correspondido me dolió. Aquél "Te amo y hace tiempo siento cosas por ti, y no estoy confundido", fue mi perdición y más cuando la respuesta que recibí no fue como yo lo esperaba... "Yo estoy enamorada de Caleb, debes irte con otra persona, porque yo ya no volveré a tocar la puerta de tu vida nuevamente, porque quiero vivir mi vida aunque sea lejos de ti".

Pero luego de conocer a Alexandra y recordar como ambos nos miramos con una sonrisa tímida y nos saludamos con un abrazo amistoso. Rememoro aquella cita en la que vestía, con mi camisa de cuadros y mi pantalón caqui favorito, me veía casual pero elegante, mientras que ella lucía un vestido ligero con flores y una chaqueta de jean, perfecto para la estación. Y recordar aquel beso tan profundo que nos dimos me hizo saber que Dios o el universo me la enviaron para conocer otro mundo.

Esta mañana al despertar mi padre me dijo que por las vacaciones de verano iríamos a Villa Gesell a nuestra casa de verano. Era una casa moderna y espaciosa, contaba con seis habitaciones una de ellas era una sala de juegos, mientras que las otras eran dormitorios con cuchetas, lo típico. Luego estaba el baño individual y el otro que estaba incluido en una de las habitaciones la cual contaba con baño en suite.

— No sé si quiera ir, papá. — le dije mientras intentaba evadirlo.

— Serán tus últimas vacaciones antes de ir a la universidad. — insistió. — ¿estás seguro de que quieres dejar pasar esta oportunidad?

— Quisiera estar tranquilo y pensarlo, sí. — le afirmé con sinceridad. — hemos tenido muchos problemas y no quisiera que algo malo suceda.

— Piénsalo.

Es increíble que mi padre esté actuando de esta manera, después de haberme enterado de lo que hizo no he podido casi estar en paz, a veces hasta siento que me engaño estando con mi novia, pensando tan sólo en Lila y en cómo hubiera sido si nuestras familias no fueran tan mierda una con la otra. No me creo Romeo Montesco, simplemente no creo que esto termine como la obra de Shakesprare, pero después de todo lo sucedido ya no quiero nada más que paz.

Hasta que el cielo nos separeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora