Déjà vu [JeffTa]

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―Descafeinado con espuma y extracto de calabaza. ―sonreí, entregándole a la clienta su orden.

Ella la recibió con gusto y se alejó.

Segundos después, escuché un enorme golpe en la parte trasera de la cafetería y fui corriendo.

Us estaba en el suelo, rodeado de sacos de azúcar.

Contuve una risa.

―No te atrevas. ―me señaló con su dedo.

―Mi tío te va a matar cuando llegue.

―Necesito que contrate más personal. Solo dos personas aquí no son suficientes y se acerca temporada alta por las fiestas... ―se levantó torpemente, intentando no caerse―. Tengo azúcar en el trasero.

Uno de los sacos se había roto así que también había azúcar regada por todas partes.

―Déjame ayudarte... ―me acerqué.

―No. No quiero que te de un ataque cardiaco, literalmente... ―se sacudió los pantalones y me sonrió―. Quédate en la caja, yo resolveré aquí.

―Si necesitas ayuda solo grita, ¿okay?

Me eché a reír y volví a la caja en el momento en que Jeff hacía sonar la campanita de la puerta.

Sentí mis mejillas enrojecerse de inmediato.

Fue hasta el mostrador y me sonrió, dejando su maletín encima.

―Bienvenido al EXPRESSO, ¿qué desea ordenar? ―sonreí, acomodando mi boina.

Jeff fingió ver el menú sobre mí.

― ¿Hay algo en la carta que incluya tus besos?

― ¿Siempre es así de coqueto?

―Solo contigo.

―Pues qué pena porque estoy saliendo con alguien así que me encuentro totalmente fuera de su alcance.

―Vaya, ¿quién es el afortunado?

―Tú, tonto. ―sonreí y lo tomé de la solapa de su camisa para besarlo―. Hola...

―Hi, sweetie. ―sonrió―. You look so cute in uniform...

―Shut up... ―le cubrí la boca―. Haces que me sonroje.

―That's the point.

― ¿Vas a querer el de siempre?

―Pero con espuma.

―Pero no te gusta la espuma. ―fruncí el ceño.

―Pero tú me dijiste que es rica así que ahora quiero probarlo así.

Sonreí y comencé a preparárselo.

― ¿Tienes muchos casos que revisar hoy?

―Solo uno, sweetie. Gracias a Buda. Últimamente he tenido mucha carga de trabajo, pero ya por fin tengo un pequeño respiro...

― ¿Si trabajaras en la firma de tus padres no tendrías menos carga? ¿Por qué no lo intentas?

―Porque no quiero a mis padres sobre mí todo el tiempo. Son excelentes intentando meterse en mi vida así que en ese aspecto los quiero lejos...

Me reí un poco.

―Son tus padres, babe...

―Y los amo, pero prefiero abrirme paso yo solo.