BORED {One piece}

15.5 De arrepentimientos [especial]

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Izo no tenía ninguna dificultad para hacer amigos. Al contrario, trataba de ser amable y cordial, que en conjunto con su apariencia delicada hacia que la gente se le acercara rápidamente.

Por eso tenía muchos amigos, además de sus hermanos.

Aunque ellos eran sus personas favoritas junto con Oyaji.

Todo lo que recordaba de su vida era con ellos. Apenas tenía dos, casi tres años, cuando llegó a una puerta. No recordaba el día, pero Oyaji si.

El hombre que fue apodado como Shirohige era bien conocido por su bondad. Así que Izo no era el primer niño que llegaba a su casa, ni el segundo, no el tercero...

La tristeza arrasaba al hombre casa que había un niño nuevo. Pero a todos los recibía con una sonrisa. Por lo cual al escuchar un suave golpe en la puerta fue a ver, viendo a un niño de cabello negro, facciones suaves y delicadas, con una hoja en su mano.

Izo.

13/11

2 años.

Newgate había respetado el nombre y registrado a Izo con su apellido, igual que sus otros catorce hijos.

Era, de sus hijos, el más vanidoso y limpio. Le gustaba mantener sus cosas en orden. También era muy compartido con sus pertenencias, menos con su común labial rojo que comenzó a usar desde temprana edad, pero Oyaji se aseguraba de que no tuviera ningún componente dañino para su hijo.

Entre sus varios amigos de la escuela y sus hermanos, había alguien con el título de mejor amigo.

Thatch. Su hermano más divertido.

No podían separarse uno del otro. Era como si de alguna manera sus personalidades se completarán.

La serenidad de Izo y la extroversión de Thatch.

El gusto por el arte del pelinegro y el talento en la cocina del castaño.

Lo que era mejor es que siempre estaban juntos, en la escuela, en casa, compartían habitación, se sentaban juntos a la hora de comer.

Ambos amaban a su familia con el alma, tenían buena comunicación con todos sus otros hermanos.

Pero Thatch e Izo era una conexión que nadie podía romper. Por muy diferentes que fueran el uno del otro.

Si hubieran podido detener su crecimiento, Izo lo habría hecho.

Porque todo empezó a complicarse cuando llegaron a la pubertad. Cuando Izo se molestó al oír cómo Thatch ya había tenido su primer beso. O cuando Thatch se frustraba al ver que había muchos chicos y chicas con los ojos puestos en Izo.

Celos de hermanos.

Claro que habían todos se cuidaban, si alguno tenía una cita era muy probable que dos de los quince hermanos lo siguieran para ver si estaban bien. Para asegurarse de su seguridad.

Pero eso no era lo que sentían ellos dos.

Izo hablo con Marco, buscando el consejo de su hermano mayor más responsable y sabio.

«-Ambos son territoriales. Hablan más entre ustedes que con cualquiera, supongo que sienten que les van a robar a su mejor amigo y por eso se molestan más de lo que deberían-yoi.»

Claro que Izo le comento a Thatch que había hablado con Marco y su opinión, que tal vez era esa situación el porque empezaban a tener tantas discusiones.