25. De fantasmas

777 95 72
                                    

◍•✧*✷◍•✧*◍

Marco por fin ya completado y acordado un horario más flexible, siente que el trabajo lo ha consumido a tales magnitudes que se siente tan asfixiado. Sus únicos alivios por el momento es Ace y Dai.

Ahora está en un turno nocturno, Dai se ha quedado algunos días en casa de Ace para acostumbrarse a vivir con él. Parece llevar bien los cambios. Le alivia saber que su vida amorosa se acopla tan bien a su paternidad.

Adora a Ace, pero si Dai no lo quisiera como lo hace y, por el contrario, se llevará mal con él, Marco no lo pensaría ni dos veces para cortar con aquella relación. Su hijo siempre irá en primer lugar.

Sí bien no es el caso, ha considerado varias veces como hubiera sido su vida si su exesposa no se hubiera ido. Sólo se le ocurre habría sido infeliz y su hijo también. La rubia que fue su esposa había cambiado con el pasar del tiempo, Marco no se arrepiente de haber tenido a Dai, pero reconoce que formar una familia con aquella mujer no fue la mejor idea. La peor, de hecho.

Marco ha calmado su furia con ella desde hace tiempo. No considera que sus acciones fueron las mejores, pero si no lo hubiera hecho su hijo no tendría la alegría que tiene ahora. Él se ha esforzado por cumplir con sus obligaciones como padre y darle a Dai la mejor infancia posible.

-Doctor Marco-ya.

El mencionado se gira, encontrándose con el recién titulado médico Trafalgar. Aún tiene que hacer su servicio para completar su especialidad en cardiología, por ello Marco sigue siendo su superior en cuanto a cargo jerárquico en el hospital.

-Tragalgar, ¿qué se te ofrece-yoi?

-¿Es cierto que usted es pareja de Ace-ya?

Marco lo mira confundido.

-Sí -responde. Contento de poder hacerse llamar pareja del pecoso-. No sabía que lo conocías-yoi.

-Es mi cuñado -dice Trafalgar, un segundo después vuelve a hablar-: bueno, era mi cuñado.

Marco lo mira asombrado.

-Me da gusto saber que sigues vivo, Ace tiene un carácter fuerte igual que sus golpes y una adoración por sus hermanos.

Law asintió, de acuerdo con el médico.

-Luffy-ya le pidió que no me golpeara.

-¿Y no lo hizo?

-Lo hizo, pero no necesite venir al hospital -contó con una mueca-. Se lo preguntaba porque necesito un favor -Marco lo miro en espera de que el joven siguiera hablando-. Quiero volver a salir con Luffy y quería saber si usted podría darle buenas referencias mías a Ace.

-Pero seguro ya le desagrafas, Ace tiene un complejo protector muy grande con Luffy y si se entera que lo vuelves a pretender hará algo más que tirarte a una piscina en su patio.

Trafalgar hizo una mueca de desagrado ante el recuerdo y la vergüenza de ese momento. Una cosa era ser humillado enfrente de desconocidos. Otra era ser humillado frente a uno de sus jefes.

-Entonces lo vio -inquirió.

-Y me reí -le confesó. Law frunció el ceño pero no dijo mucho más-. Veré que puedo hacer, Ace es amable pero tiene un buen carácter, trata de volver a conseguir la confianza de Ace.

-La cosa es que Ace nunca aprobó nuestra relación y me odio cuando terminamos -se lamenta Trafalgar.

-Entonces robate al novio -bromea Marco.

Sin saber que por muy listo que fuera el doctor Trafalgar también tenía una parte estúpida e impulsiva enlazada con la D oculta en su apellido.

Law considera la recomendación seriamente...

BORED {One piece}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora