Lovers Rock | SEUNGIN

➸ Enamorado.

③③

En cuanto llegaron a la casa de Seungmin, ambos fueron a la habitación. Jeongin quería seguir practicando, por lo que tomó prestada la guitarra eléctrica de su amigo; Seungmin sólo lo miraba, sentado en la cama. Para él, sonaba perfecto, pero el menor insistía en que sí había un error.

➸

Seungmin soltó un suspiro y negó con la cabeza nuevamente.— ¡Está súper!

—¿Súper qué? ¿Súper mal? ¿Súper horrible?

—Súper bien, Yang. Ven acá.

Jeongin miró hacia abajo en silencio antes de acceder y caminar hacia el chico, soltando la guitarra contra la pared.

Caminó hasta llegar frente a Seungmin y frenó justo allí. Seungmin tomó la cabeza de Jeongin con sus manos y delicadamente lo atrajo hacia él, besándolo en la frente y haciendo que se inclinara.

—Es la primera vez que haces eso.

—¿Qué?

—El beso en la frente.

—Oh— soltó con una sonrisita— No, de hecho, ya lo había hecho antes. ¿Recuerdas nuestra primera vez? Besé tu frente después de decir que te amaba.

—Ah, claro, tú te sabes todos los detalles.

—Claro, un momento tan especial, ¿cómo no?— rodeó su cadera con ambos brazos, sosteniéndolo con fuerza. Subió un poco la cabeza para poder ver el rostro del Jeongin, quien no estaba tan inexpresivo como solía.
—Tan lindo, como siempre... Me gustas mucho.

—Ya lo sé, Seungmin... Te empeñas en decirlo todo el tiempo.

—Porque es la verdad, y cada vez lo siento más fuerte, ¿entiendes?

—Claro... Entiendo.

—¿Qué hay de tí?— inquirió, apoyando su cabeza en el pecho de Jeongin.

Pronto, sintió unas manos rodear esta misma, mientras hacía leves caricias en su cabello castaño.

—Ya lo dije, tú también me gustas.

—¿Qué tanto?— preguntó, bajando sus manos hasta su cadera y apartándose un poco para verlo a los ojos.

—No puedo decir que más, porque siempre fuiste muy lindo... Eres atento, tierno y amable. No sé, es muy fácil gustar de tí, ¿cuánta gente no habrá?

—Es que eso no me interesa, sólo quería saber si tú sientes lo mismo que yo. Suena muy cursi, pero sólo me importas tú.

—Iugh, muy dulce.

—Como tus labios.— sonrió nuevamente y llevó una mano hacia su mejilla, moviéndola con suavidad y apreciando la vista que eso le daba. «Por Dios, parece un enamoramiento de verdad».

—¿Quieres probarlos de nuevo?— soltó el menor junto a una sonrisa pícara.

Seungmin casi que queda mudo, embobado, pero claro que asintió con la cabeza al segundo.
—Por supuesto.

Jeongin, al segundo, se inclinó para alcanzarlo, iniciando otro beso. Ya ni siquiera llevaban la cuenta, parecía un hábito.

Seungmin jaló al contrario para que se acercara más, pero terminó subiéndose encima de él. Sus brazos rodearon los hombros del castaño, todavía sin despegarse de sus labios. Por otro lado, los brazos de Seungmin rodeaban toda su cintura, como si estuviera abrazándolo.

El mayor se separó del beso para rozar suavemente con sus labios una de las mejillas del chico, cosa que hizo unas dos veces más. Jeongin sonrió ante esto, y sólo respondió acariciando su cabello.