Un giro inesperado lleva a Rafael a conocer un nuevo mundo de placer y una vida que jamas deseó, ¿o si? - En emisión
Este relato contiene lenguaje fuerte y situaciones explícitas de relaciones sexuales con temática BDSM, no se recomienda a lectores...
Holaaaa, sé que me desaparecí y lo siento mucho, fueron unos dias complicados, bueno aún lo son pero necesitaba sacar esta parte porque mi mente empezó a fantasear con lo que vendrá después.
La mañana siguiente Rafa se despertó con renovada energía, bueno más bien fue despertado, la rutina laboral de Axel lo obligaba a levantarse temprano y al dormir de nuevo juntos inevitablemente termino despertando al cachorro, quien inmediatamente comenzó con su habitual rutina, excepto por el hecho de que esta vez su Amo no lo requirió en su cuarto, en cambio alcanzó a los otros directamente en el desayuno.
- Dado que hoy será un día bastante especial y no puedes interrumpir con los procesos, usarás un equipo especial, en cuanto termines con la cocina baja por él, esta sobre la mesa en el calabozo.
- Sí Señor.
El primero en terminar fue Sebastian, quien simplemente se levantó de la mesa y fue a su habitación, poco después terminó el cachorro quien esperó pacientemente a Axel para levantar la mesa y atender la cocina, una vez terminado se excusó y se encaminó al sótano, hacía varios días que no ponía un pie en aquel lugar, el Amo lo mantenía en la parte superior haciendo trabajos de limpieza o simplemente como compañía, si bien Rafa sabía que había dejado de ser una persona para convertirse en el esclavo/juguete de su Amo agradecía el trato casi humano que éste le daba.
Al entrar en la habitación poco iluminada notó que el suelo estaba muy frio y ligeramente sucio, podía sentir una gran cantidad de polvo y algunas pequeñas piedras o basuras que sus pies atrapaban. Caminó directo a la mesa en la que una vez estuvo atado para encontrar una pesada camisa de fuerzas, haciendo inmediatamente que su verga se tensara en su jaula provocándole un pequeño dolor, a lado había también un par de mordazas, así como un tapón anal sorpresivamente grande. Rafael tomó las cosas y subió de nuevo, cuando cerró la puerta del calabozo sintió las tres descargas que indicaban que debía presentarse con su Amo, entrando con el equipo aún en brazos.
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- Ponlo en la cama y mantente de pie.
- Sí Señor.
Sebastian estaba desnudo excepto por unos shorts muy ajustados a su figura y que tenían una parte desmontable al frente, además podía observar pequeñas gotas de agua en su pecho y algunas aún escurriendo de su cabello.
- Hoy es un día especial para la mercancía, no quiero que te involucres, no puedes hablar ni tocar al pequeño ni a ninguno de los otros, hoy vas como MÍ compañía.
