The Rigsby's - Patrick Jane y tú <3

|Odió en lágrimas|

.-Los Rigsby no lloran, niña- mire a mi padre, no estaba muerto.

- Jefa! Llame a una ambulancia!- gritó Wayne.

Lo abracé y tome su mano, mi hermano estaba a nuestro lado, y le repetía a papá que estaría bien.

Lo siguiente fueron las sirenas, entraron y sacaron a mi padre en la camilla, el les gritaba que estaría bien, y los insultaba, Wayne trato de calmarlo y decidió que el iría con el antes de que la cosa se pusiera peor.

Me quedé con los demás, Cho me abrazaba de camino al hospital, yo lloraba, solo lágrimas, sin llanto.
Siempre supe que tal vez un día no volviera de una entrega o que uno de sus rivales lo mataría en nuestra casa, hasta esperaría que un día nos obligarán a mi hermano y a mí a ver cómo lo mataban, pero nunca pensé que sería mi culpa, ya estoy hasta el cuello con lo de red John... No importara ahogarme por completo.

Estaba decidido, esa noche lo buscaría, sabía por dónde empezar.

Llegamos al hospital y corrí a la recepción. Mi hermano estaba sentado mirando al suelo y su pierna no paraba. Corrí a abrazarlo y nos dijo que lo habían llevado al quirófano.

Pasaron las horas, Lisbon envío la nota al laboratorio, ella y van pelt fuero a revisar la casa y luego verían las cámaras de seguridad cerca del BIC. Aunque no me sorprendía era sorprendente, Cho se quedó con nosotros en el hospital, me abrazaba y tenía su mano en el hombro de Wayne.

Así pasaron los minutos, no podía evitar caminar de un lado a otro y lo hacía cuando Cho regresaba con un par de donas para nosotros.

- Familiares del Señor Steve Rigsby!?- dijo un médico.

-Aqui!- mi hermano se levantó de un brinco y todos caminamos hacia el medico.

- El señor está estable pueden pasar pero no lo alteren- dijo caminando y lo seguimos. - cuál quier cosa toquen el botón junto a la cama y vendrá un médico.

Abrió la puerta y ahí estaba mi padre el la cama... Con suero... Y totalmente indefenso...

Nunca lo había visto así, realmente nunca lo había conocido como persona normal... Siempre fue el hombre que llevaba un arma en sus pantalones y que le gritaba a todo el mundo.

Estuvimos ahí aún estaba anestesiado el seguía molesto y decía incoherencias, yo solo lo miraba y no sentía nada... Lo amaba pero no me provocaba dolor verlo así.

A mí hermano un poco, el es muy sentimental, extrañamente más que yo.

Llegaron las chicas y pasamos un largo rato entre papeleo y que mi padre insultara a los doctores. Estaban por dar las 5 y yo no sabía cómo salir de ahí, así que le dije mi plan a cho, no estaba muy de acuerdo pero no podría detenerme. Así que me cubrió y yo salí del hospital.

Iré por Patrick y más le vale estar con vida.