TomUn mes había pasado. En las noticias únicamente hablaban de mi hermano y amigos y del cambio que habían dado. Ahora no eran los mismos, atacaban sin piedad a todo aquel que intentaba acercárseles. La gente les temía.
Bill, mi dulce hermanito, ahora no tenía nada de dulce y eso me hacía sentir terriblemente mal. Siempre fui yo el rebelde, siempre fui yo el problemático, lo último que quería, era que mi hermano se convirtiera en lo mismo que yo.
Aparte Emily no se me sale un segundo de la cabeza. No saben cuánto la extraño, me he convertido en una persona más fría y lo único que mi corazón desea es venganza. El deseo de matar a todo el maldito mundo corre por mis venas, específicamente a esos hijos de perra que se habían entrometido en nuestras vidas, separándonos.
— Lo que me faltaba.—Mi mirada se posó en aquella insoportable. Me jodía el hecho de que no podía pasar mucho tiempo solo.
— Hola mi amor.—Se acercó a mi e intentó abrazarme. Inmediatamente la empujé, sacándola de mi vista.
— Yo que tú corro lo más lejos que pueda.—Le lancé una mirada amenazante. Esta tragó en seco, nerviosa.— Voy a acabar contigo y con tu maldito amiguito.—Amenacé, señalándola con el dedo en forma de advertencia.—¡Te lo prometo!—Finalicé, tomándola por ambos brazos con fuerzas, lastimándola, haciéndola jadear de dolor.
Su mirada reflejaba nervios, sin embargo, esto hizo que mi ira siguiera aumentando. Me acerqué aún más a ella, pegándola de la pared. Tomé su rostro con fuerza, obligándola a mirarme a los ojos.
— ¡T-Tom!—Gritó con dificultad.— ¿Que mierda sucede contigo? ¡Aparte de que me tratas cómo una perra, has matado a casi toda mi maldita seguridad! ¿Que diablos te pasa?—Preguntó con enojo, intentando apartarme.
— ¡Pues quizás si esos hijos de Perra hicieran lo que yo les pido, no fuera así!—Grité, tomándola por el pelo, tirándola al piso, dañándola. Odiaba que me respondiera y ya se lo había dicho mil veces.
— ¡Ahg! ¡Estás loco Tom!—Se quejaba de dolor, aún tirada en el piso.
La miré con lástima, con deseos de acercarme a golpearla hasta saciar mi sed de venganza, pero tenía otros planes. Aún no era el momento y el hecho de que había mucha seguridad, lo complicaba aún más.
Puede que pudiera matarla sin problemas, pero fácilmente sería el siguiente. En otras circunstancias se me hubiese importado morir, pero tan sólo de pensar en todo lo que sufriría Bill, me ponía mal. Necesitaba deshacerme al menos de la mayoría, antes de proceder.
— ¿Sabes que? ¡Aléjate de mi antes de que pierda la paciencia y acabe contigo!—Pedí con autoridad, apretando los puños de manera exagerada. Esta no dijo nada, se paró del piso y salió de la habitación, dejándome solo.
O eso pensé porque mi puerta fue abierta nuevamente, dejando a mi vista a uno de los tantos partícipes de toda esta mierda.
— ¡Oye, niño bonito!—Me señaló con molestia.—Debes aprender a manejar tu ira.—Inquirió y entendí que lo decía por lo ocurrido hace un momento. Me jodía que habían cámaras en casi todos lados.
— ¡¿Y tú quien eres para decirme que tengo que hacer?! ¿Quieres visitar a tu amiguito? ¿Es eso?—Tomé un arma y apunté a su dirección. Este empezó a negar con la cabeza y salió de la habitación.
— Eso supuse...
Maldito idiota, claramente no tenía balas, porque de ser así, acabaría con todos ustedes de una maldita vez y me largaría de aquí.
ESTÁS LEYENDO
SHE RESCUE ME | Tom kaulitz
FanfictionElla me rescató - Tom kaulitz‼️ ¿Te has imaginado lo que podría llegar a pasar si dos personas con el mismo carácter se chocan? Tom kaulitz, un chico con un horrible pasado en la mafia, después de años decide intentar cambiar por su hermano, quien s...