Tom— Tom, disculpa que te moleste.—La voz de Guzmán resonó en toda la habitación.—Me acaban de confirmar que se están robando las ganancias de sus negocios.—Informó, rascando su nuca nervioso.—Se trata de Robert Fischer...
— ¡¿Pero cómo diablos es eso posible?!—Golpee la pared fuertemente, descargando la ira.—¡Iremos por él! ¡Reúnelos a todos, rápido!—Sentía que me quería explotar la cabeza de rabia. Quiero cambiar pero siempre que soy bueno, se aprovechan de eso. Por eso cada vez vuelvo con más fuerzas, si las personas no me respetan por las buenas, pues a las malas será.
— Maldito imbecil, ¿Creíste que por haber estado herido no me iba a vengar de ti?—Susurré para mi mismo, manteniendo un semblante serio.
Bajé lo más rápido que pude a la sala para encontrarme con mi personal, no iba a quedarme con esta.
— Guzmán, Henrique.—Los señalé a ambos.—Ustedes vienen conmigo y no quiero errores, porque de ser así, lo van a lamentar.—Con bastante autoridad hablé y estos solo asintieron con la cabeza.
— Bien.—Suspiré, desviando la mirada.—Los demás cuiden a la mocosa y a mi hermano.—Finalicé mis palabras para pararme de mi asiento. Todos nos dirigimos a los autos.
— Te arrepentirás hasta de haber nacido, malparido.—Una sonrisa diabólica se formó en mi rostro. Después de todo ese dinero no lo necesitaba, pero por el hecho de verme la cara de idiota, lo iba a pagar muy caro.
[...]
Emily
Veía a Tom retirarse con dos de sus guardaespaldas. Iba bastante enojado, nisiquiera me atreví a acercarme y preguntarle, porque sabía que cuando estaba enojado era agresivo y no estoy de humor para aguantarlo.
Casi estaba recuperado y eso me hacía sentir bien, pero por otro lado, ahora estaba saliendo cómo solía hacerlo. Nisiquiera entiendo que me está pasando, pero empieza a importarme.
Y pues la amistad que había construido con Bill es bastante hermosa, aquella discusión que tuvimos quedó olvidada. Ambos salíamos de compras juntos, incluso hacíamos pijamadas y nos maquillábamos. Definitivamente estoy muy feliz de que sea él quien esté saliendo con mi mejor amiga.
Me encontraba en mi habitación, sola cómo siempre, hasta que cierto chico pelinegro entró. Inmediatamente se sentó a mi lado de la cama, escaneando cada parte de mi rostro y de la nada empezó a reír.
— ¿Tengo cara de payaso Bill?—Pregunté con un tono de voz molesto, manteniéndome cruzada de brazos.
— De payaso no, pero de Nahual atropellado si.—Sonrió mostrándome los dientes. Me dieron ganas de matarlo.—¡Dios mío Emily! Estás horrible, pareces una cuarentona.—Estalló de risas, tirándose hacia atrás, quedando acostado en la cama.
— ¡Pues claro que lo parezco Bill!—Grité con ira, negando con la cabeza.—¡Porque al contrario de ti, estoy sufriendo mucho! Aguantando los cambios de humores de tu hermano.—Empecé a enumerar con los dedos.—¡Sus maltratos y mucho más! Pero claro, ¡Como todo está perfecto contigo, no me entiendes!—Finalicé, lanzándole una almohada en el rostro.
— Tienes razón...—Su sonrisa desapareció por completo y agachó la mirada.—Perdóname Emily, sé qué no es fácil lidiar con mi hermano... Hablaré con él.
— Da igual Bill, no te preocupes... Después de todo, tú no tienes la culpa.
— Lo siento por haberte dicho fea Emily.—Habló, ocultando una sonrisa.—Aunque si lo estás.—Carcajeó fuertemente. Yo solo rodé los ojos y me vi obligada a reír con él.
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SHE RESCUE ME | Tom kaulitz
Fiksi PenggemarElla me rescató - Tom kaulitz‼️ ¿Te has imaginado lo que podría llegar a pasar si dos personas con el mismo carácter se chocan? Tom kaulitz, un chico con un horrible pasado en la mafia, después de años decide intentar cambiar por su hermano, quien s...