VII

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No había sido mi primera opción el ir a Sevilla.

Gavi me había hablado de que sus padres insistían en que fuésemos a la feria y no había tenido más remedio que aceptar.

Aunque la curiosidad me mataba y quería ver que se hacía allí.

Habíamos llegado por la mañana y habíamos estado con sus padres pasando el tiempo.

Luego llegó Aurora, su hermana y venía cargada de millones de cosas.

– ¿Estás segura de que se necesita todo esto para vestirse de flamenca?– pregunté viendo como dejaba  todo en una silla.

– Gia, aquí la que va más arreglada es la mejor.– murmuró.– Te aseguro que va a encantarte.

Sonreí y entonces me sentó en una silla.

Empezó a peinarme y me hizo un moño en lo alto de la cabeza para después meter una peineta de color rojo.

Luego me pasó un vestido y unas zapatillas de esparto con algo de cuña.

– Tacones no. Me lo agradecerás.

Asentí sin entender nada y me fui vistiendo mientras ella se arreglaba.

Cuando me miré al espejo me entró la risa.

Si alguien me hubiera dicho que iba a acabar vistiéndome de flamenca antes, igual me habría reído en su cara. Pero aquí estaba.

Cuando Aurora terminó de arreglarse ambas bajamos las escaleras.

Vimos a los padres de Aurora y Gavi y vi a este último comiéndose unas uvas de espaldas a nosotras.

Aurora carraspeó y todos nos miraron.

Gavi me echó un vistazo y luego me miró sonriendo.

– Vámonos. Javi está allí esperándonos.– murmuró Aurora.

Todos salimos de allí y nos montamos en los coches.

Belén y Pablo se habían ido con Aurora, así que Gavi y yo íbamos solos.

Lo miré y vi que estaba sonriendo mientras conducía.

– ¿Qué te hace tanta gracia?– pregunté sonriendo.

– Es gracioso verte vestida así.

Le pegué en el brazo y después aparcamos.

Nos bajamos del coche y miré todo detenidamente.

Había niños correteando de un lado a otro y había gente bailando en una carpa.

Gavi agarró mi mano y me hizo seguirle.

Llegamos hasta Aurora, que estaba con un chico.

Gavi y él se saludaron y luego me lo presentaron.

Después Aurora me agarró del brazo y caminamos para meternos en una de aquellas carpas.

Aunque no fue flamenco lo que escuché al entrar.

"Superman sin capa" sonaba a todo volumen allí dentro.

Miré a Aurora que me pasó un ticket.

– Aquí ponen de todo, así que respira tranquila.– murmuró y me llevó a la barra que había.

Me pedí Puerto de Indias con fanta de limón.

Después Aurora me llevó con ella hasta el centro y empezó a bailar.

Me eché a reír y la imité bailando.

La canción acabó y empezó "Tropical" de La Mafia del Amor.

Gavi y Javi llegaron hasta nosotras y yo le di un sorbo a mi bebida.

Aunque aquella canción no duró demasiado, porque "Bandidona" de Saiko empezó a sonar a todo volumen.

"Manda un mensaje pa' las 3
Pa' afuera la ropa y el estrés
Tú y yo Plan B, somos el dúo del sexo
Voy pa' adentro
Dándote al ritmo del speaker

Una y otra vez
Hasta que el colchón se rompa
Le toco donde ella sabe, la elevo y la pongo cachonda"

Me acerqué a Gavi mientras la canción acababa y le vi darle un sorbo a mi copa.

"PIRIBIRI" empezó a sonar y yo me pegué a él posando una de mis manos en su nuca.

Él bajó sus manos a mi cadera y bailamos despacio mientras nos mirábamos.

"Mi Estrella Blanca" empezó a sonar y lo miré.

– Tu sígueme.– murmuró mientras agarraba un poco mi vestido y lo levantaba.– Agárralo y simplemente déjate llevar.

Le hice caso y miré a Aurora.

Empecé a imitar sus pasos hasta que ya salió solo.

Gavi me agarró y me hizo dar una vuelta.

Yo sonreí acercándome a él y él me apretó contra sí.

Estuvimos bailando juntos hasta que la canción acabó.

Ambos nos miramos fijamente.

Hasta que regresé a la realidad y le di un sorbo a mi copa.

Giré mi cabeza para hablar con Aurora, pero no pude decirle nada porque estaba besándose con su novio.

"Rakata" empezó y yo me puse a cantar y a bailar.

Me pegué a Gavi mientras bebía y le bailé un poco.

Él me miró sonriendo y agarró mi cintura.

– ¿Qué pretendes, Gia?

– Quiero bailar, pero tu hermana está ocupada.

– Muy bien, ocúpate tú también.– dijo.

No pude contestar porque entonces devoró mi boca con ganas y me agarré a su cuello para besarnos con más intensidad.

Entonces todo a mi alrededor dejó de existir.

Sentí sus manos bajar por mi cintura y le mordí el labio para apartarme.

Nos miramos fijamente y me separé un poco mientras le daba otro sorbo a mi copa.

"Decían que por ser menor que usted yo no la quería
Que no era amor, sólo interés y aquí estoy todavía
Y aunque pase el tiempo, lo sabes bien
Que soy aquel chico que te hizo sentir mujer
Siendo mayor que yo, usted..."

Empecé a cantar cuando Aurora se acercó a mí sonriendo.

Luego ambas nos pusimos a bailar y así estuvimos durante toda la noche.

Bebimos y bailamos como nunca.

Luego Gavi tuvo que llevarme en brazos porque mis pies pedían auxilio.

Cuando llegamos a su habitación me dejó sobre la cama y me deshice de las cuñas.

Después me senté en la cama y lo miré embobada.

Se quitó la pajarita tirándola por ahí y se quitó la chaqueta.

Después se giró y me miró mientras se acercaba.

Le vi bajar la cremallera del vestido y entonces me lo quitó.

– ¿Mejor?– preguntó.

Asentí sonriendo y me sonrió.

Después se deshizo de su ropa y se tumbó conmigo.

Nos miramos fijamente y yo me quité la peineta tirándola por ahí mientras me reía.

– ¿Te lo has pasado bien?– preguntó.

– Ha estado bien. Ahora entiendo porque los andaluces tenéis tanto arte.

Me miró sonriendo y luego acarició mi cara.

– Duerme. Es tarde.

Cerré los ojos y me quedé dormida bajo sus caricias.

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Como me gusta el reggaeton antiguo mamá 😫

𝐅𝐈𝐋𝐋 𝐓𝐇𝐄 𝐕𝐎𝐈𝐃 +18 | Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora