𝐭𝐡𝐞 𝐝𝐨𝐰𝐧𝐬𝐢𝐝𝐞𝐬 𝐨𝐟 𝐢𝐫𝐫𝐞𝐬𝐢𝐬𝐭𝐢𝐛𝐥𝐞, james potter

𝟏𝟗. 𝐝𝐨𝐥𝐨𝐫𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐨𝐦𝐚𝐠𝐨 𝐲 𝐫𝐨𝐭𝐮𝐫𝐚𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐨𝐫𝐚𝐳𝐨𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐥𝐨𝐧𝐠𝐚𝐝𝐚𝐬

━━SE SUPONE QUE TIENES QUE MANTENERLO HELADO ━━BUFÓ JAMES, AGARRANDO UN PUÑADO DE CUBOS DE hielo mal envueltos en una toalla húmeda.

━━Potter, juro por la tumba de Merlin que si te acercas a mi con esa— esa cosa ━━advirtió Brigitte, su voz peligrosamente baja━━. Voy a cometer un asesinato.

━━Ni siquiera está tan helado ━━silbó James, acercándose a ella unos centímetros con precaución. Estaban en el dormitorio de los chicos, y los otros Merodeadores habían ido a escondidas a las cocinas a buscar dulces━━. Además, te va a doler más si no reduces la circulación sanguínea. Lo he aprendido por experiencia.

━━No me importa ━━escupió Brigitte, dando un paso hacia atrás tercamente.

━━Si, bueno a mi si ━━contraatacó James, su mandíbula apretada━━. Hay ciertas medidas que estoy dispuesto a tomar por las personas que me importan, Alarie. Y ya sea que te parezca o no, me importas mucho.

Brigitte se congeló, su mente computando nuevos caminos de recepción para palabras tan desconocidas. Por un breve momento peleó contra el impulso de salir corriendo del dormitorio de los Merodeadores gritando. Su conciencia inundó su sistema mientras la perplejidad nublaba su rostro.

Me importas mucho.

Cada aspecto físico suyo se mantuvo impasible, pero su corazón golpeaba furiosamente contra su caja torácica, un recordatorio constante de todas las implicaciones físicas y metafóricas por igual que resultaron de James y su muestra de afecto desvergonzada. Se contuvo de cavar a través de su piel y contener al músculo estúpido, rompiendo la carne de sus huesos tan fácilmente como quitar pelusa de su abrigo favorito. Finalmente, sacudió su cabeza para liberarse de cualquier emoción persistente, y caminó hacia James, su mano izquierda extendida.

James levantó la mirada, confundido━━. ¿Qué estas haciendo?

━━Dámelo ━━dijo Brigitte sin tono.

James puso tentativamente el fajo de toalla mojada y cubos de hielo en su mano, haciendo una mueca cuando un cubo de hielo se cayó y se rompió contra el suelo. Lo pateó casualmente bajo su cama, esperando que no se derritiera y terminara en un final amargo con su tarea de Transfiguraciones de la ultima semana━━. Siempre puedo ayudarte, sabes.

━━No necesito tu ayuda.

A ella le enseñaron civilidad y amabilidad, afilada como un bisturí contra la piel, pero todo aquello importaba tanto como el cubo de hielo que se estaba descongelado en el piso bajo la cama de James.

Salió de la habitación, molesta con nadie aparte de ella misma.

Ella y su afecto mezclados como aceite y agua. Estarían dispuestos a hacer lo que sea dentro de las leyes de la naturaleza para evitarse.

Los cubos de hielo derritiéndose fueron tirados a la basura con un golpe en el segundo que supo que estaba fuera del alcance del oído.

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LILY CAMINABA HACIA LA PUERTA DEL BAÑO DE CHICAS DEL PRIMER PISO, EL PIN DE Prefecta brillando pulcramente contra su cuello prensado. Tal vez la Persona Misteriosa de la Carta era alguien en el pasillo, y se veía estúpida, bloqueando el lugar.

No se había esperado encontrar una caja de viejos misivos bajo uno de los viejos lavaderos. Aunque ella disfrutaba mucho del trabajo de Sir Arthur Conan Doyle, ella no era Sherlock Holmes. Podía decir con seguridad que sus habilidades de observación eran tan astutas como las de un bloque de cemento.

Algunos de los de primer año se le habían acercado, quejándose de las tuberías rebalsándose otra vez. Había tenido dificultades en explicarles que ella no era plomera ( eso estaba lejos de ser parte de sus habilidades ), y Remus no se sentía cómodo en el baño de mujeres, así que trajo unos cuantos manuales de la biblioteca, su varita, y una gran porción de su determinación.