Capítulo 17 - Hechizo

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Los apegos no son más que las ataduras del alma y el amor la energía del corazón. ~ER.

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Shin premanecia en el suelo mientras que Bills solo lo veía algo plasmado, no sabía si ayudarlo a levantarse porque en ese estado no parecía muy buena idea ya que por lo visto estaba muy molesto y no quería que pensara que trataba de aprovecharse de sus situación, y si lo lastimaba más al querer ayudarlo con su increíble rudeza podría romperle un hueso si este empezaba a forcejear como la última vez qué pelearon y si llamaba a Whis y los otros dos shinjins venían también claro que no le iban a creer que está vez el no tuvo la culpa de nada más bien por el contrario si le reprochan de abusivo o algo peor...

Bills dijo ya muy frustrado: ¡maldita sea!

Entonces ya que no había nadie más,Bills decidió ayudarlo, por cierta razón ver tirado y temblando al enclenque de su kaioshin se le hacía un poco imprudente dejarlo ahi. De esta manera lo toma con cuidado y lo carga entre sus brazos con extrema delicadeza como si se fuera a romper eso por si acaso se había lastimado al caer.

Shin se sentía extraño, pero poco a poco empezó a recuperarse.

Shin: dime qué hiciste, Bills

Bills: bueno, pero primero déjame llevarte a tu habitación y no te muevas o podría romperte un hueso..

Shin pensando "¿Bills siendo conciderado? De seguro trama algo..."

Entonces Bills se sienta a un lado del shinjin sin mirarle a la cara empieza a contar el recuerdo de aquel hechizo que elaboró junto con ayuda de alguien, de quién cuya identidad se asegura de no revelar.

Recuerdo de Bills

Los días pasaban lento como la arena de sus relojes en aquella solitaria habitación.
Aquel felino había decidido tomar una siesta antes de que cualquier cosa mas pasará en el universo, ya que con el asunto de Black tenía el presentimiento de que su ayuda sería requerida, entonces sin preocupaciones se acostó en su cama como siempre.
Un día Whis lo despertó para decirle que iría a la tierra ya que la señora Bulma habría llamado para brindar algo de información sobre ese asunto a lo que Bills se negó rotundamente girando su cuerpo en la dirección contraria dándole la espalda al angel quien hizo una exhalación llena de frustración para marcharse el solo, aunque no sabía que, todo eso era parte de un plan que el mismo dios de la destrucción elaboró con ayuda de su secuaz secreto al que tanto respeto le tenía, un respeto mas grande que a cualquier otro kaioshin con quién haya tratado.
Dicho kaioshin era listo y poderoso más que cualquier otro e incluso más que su propio hakaishin contando con el conocimiento de técnicas antiguas siendo algunas de estas prohibidas; unas de las cuales le habían sido enseñadas personalmente a el felino; además de ser un poco mayor que Bills y que tenía una cierta obsesión un tanto enfermiza con él.

Entonces se sentó en su cama, bostezando abiertamente y entonces abrió los ojos cuando sintió que esa presencia estaba por llegar.

Bill: por fin llegas, justo a tiempo.

En eso frente a él un kaioshin encapuchado aparece justo a la orilla de su cama para seguido de eso retirarse la capucha de la cabeza.

???: Cuánto tiempo sin verte, querido Bills

Bills le sonríe: a mi tambien me da gusto verte bello kaioshin.

Kaioshin: je ¿porque no solo me dices por mi nombre?

Bills: no, las paredes escuchan...

Kaioshin: entiendo, bueno dime qué es lo que quieres que haga hoy por tí.

Tú mi talismánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora