Estoy maldito.

Vida pasada.

El aire era algo notable, la noche brillaba con las estrellas, Kocho salió al patio mirando el cielo y pensando en todos los que están ahí. Hasta que sintió un escalofrío.

Shinobu: No puede ser.

Kocho volteó mirando quién estaba detrás suyo.

Douma: Shinobu-chan, ¿me extrañaste?

Shinobu: Douma...

Kocho corrió hacia él para abrazarlo fuertemente.

Douma: ¡Estoy sorprendido! ¿Cómo es que sigo aquí?

Shinobu: Eso era algo de emergencia por si Nezuko seguía siendo demonio... Al menos viviría sin Muzan.

Douma cargó a Kocho llevándola a dentro de su finca nuevamente.

Shinobu: Cuidado, pueden despertar nuestra bebés.

Douma: ¿Eso si quiera importa?

Shinobu: Nadie sabe que estás vivo, solamente yo.

Douma: Quizás es mejor que no quede nadie.

Douma bajó a Kocho al llegar a su habitación, donde no tardó en besarla pero ella se separó para acostarse.

Shinobu: Eres increíble... Hiciste que no pudiera vivir sin ti.

Douma se acostó a su lado ya tomándola del trasero para apegarla a él volviendo a besarla. Si había hecho algo para evitar que él muriera sabía que había conseguido el hecho de que ella fuera dependiente de él, a pesar de todo, no era algo esperable para él pero, ¿cómo negarse ante un acto como ese? Después de todo gracias a ella él seguía viviendo, lo cual hacía desearla más.

Kocho terminó subiéndose encima de Douma para volver a besarle este ya estaba manoseando uno de sus pechos por encima de la ropa hasta que quiso desnudar a Kocho pero ella se levantó poniéndose en una esquina.

Shinobu: Me cuesta mucho volver a sentir tus manos... A pesar de todo mi cuerpo te desea... No quiero sentirme así.

Douma se levantó para ponerse enfrente suya y darle un beso en la mejilla agachandose.

Douma: Es el destino, nosotros vamos a estar juntos para siempre.

Kocho comenzó a llorar terminando por sentir los dedos de Douma secando aquellas lágrimas, ella lo estaba mirando mientras él se acercaba más a ella.

En un momento él vio como el cielo estaba poniéndose claro, la brisa estaba presente y Kocho se aferraba de su ropa, sintiendo cómo cayó desde la ventana de Kocho estando ella encima suyo apenas pudo reaccionar ya que se estaba quemando por el sol. Ya había amanecido... Lo último que vio fue a Kocho sonreír como nunca la había visto... Por primera vez la vio feliz.

Douma terminó de desaparecer, Kocho se levantó gritando fuertemente, quería desahogarse de todo lo que se tuvo que contener.

Shinobu: Quería matarte yo misma, no quería que murieras de ninguna otra manera, quería ser yo... Quien vengara a todos.

Kocho algo herida fue nuevamente adentro de su finca, después de todo... Había quedado con Tomioka para ir a comer.
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Así que existe en infierno... No importa, pagaré todos mis pecados y cuando vuelva a nacer... No descansaré hasta encontrarte Shinobu, nos volveremos a ver y esta historia será muy diferente, porque te amo... No volveré a dejarte ir, no volveré a cometer los mismos errores. Lo juro, esta será nuestra maldición.