LET THE LIGHT IN | REGULUS BLACK

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Nunca tuve un problema con las fiestas. ¿Por qué iba a tenerlo? Eran mi distracción de un semestre lleno de tareas y exámenes difíciles. Adoraba en especial las que James hacía porque era una manera de tenerlo cerca. De ser parte de su mundo. Todos estos años lo fui, de alguna manera, por ser la mejor amiga de Sirius. Pero me costó demasiado por fin poder sentirme parte de ellos. Remus y Peter jamás me dirigían la palabra, no tendrían porque. No éramos amigos como tal. ¿Pero ahora? Ahora todo es diferente. James es mi novio. No. James es mi prometido. Los chicos y yo nos llevamos de maravilla. Adoro pasar el rato con ellos y mas cuando festejan un partido. Suelen ser las mejores.

Pero por alguna razón hoy en específico quería estar con James. No porque lo necesitara, no porque me sintiera sola o algo por el estilo. Pero creo que fue el factor de duda. Primero Regulus, cuando me planteó la idea de que siempre tendría que vivir con la idea de que James amó a Lily. De que quizás siempre lo haría. Luego Pandora el día de hoy diciéndome que la razón por la cual James me había pedido matrimonio era porque tenía que tenerme asegurada justamente el año en el que el no iba a estar en el colegio.

¿Por qué nadie podía estar feliz con mis relaciones? La vez de Regulus, era claro que ni una sola persona lo aprobaba. Ahora... ahora es peor. Quizás igual. Porque si era Regulus el problema, Sirius y James eran los molestos. Si ahora James es el problema, Pandora y Regulus eran los molestos. Pero ¿cuando alguien podría estar por completo feliz por mi? Es frustrante, es molesto. Y no me deja pasar un buen rato. Por lo cual, en esta fiesta no me sentía a gusto.

Fui al baño, y Lily estaba maquillándose ahí. Nos sonreímos y cada una ve de su espejo para arreglarse.

- luces muy bonita. - dije para romper el silencio incómodo. Y si, vaya que lucía preciosa. El cabello más lacio que cualquier otro día, usaba algo de color rojo sobre sus labios y decidió rizar sus pestañas. Esto era nuevo. Lily se había arreglado y le rogaba al cielo que fuera para el chico de Ravenclaw que estaba viendo. - ¿invitaste a Patrick?

- si, el um... esta abajo con los chicos. Remus insistió en que se los presentará y fue instantáneo el momento en el que se llevó bien con todos. - sonreí con ella. - incluso a James.

Oh ¿por qué tuvo que decir eso?

- ¿por qué a James no le agradaría? - tenia que preguntarlo. Tenía todo el derecho en hacerle entender que no me sentía a gusto con la idea de que ella siga pensando que el la quiere de esa manera. Y claro que se da cuenta. Deja de pintarse los labios y baja el producto sobre el lavabo.

- oh porque... porque quidditch obvio. - levanta ambos hombros. - ¿sabes? La competencia. En todo caso, a Regulus tampoco le agradaría.

- hemos vuelto a ser amigos. - le confesé y ella me mira con asombro. - nada importante, solo es un hecho.

- me parece bien. En serio, Kate. Creo que es una decisión muy madura de tu parte... has dejado en el pasado lo que pasó. Y esta Perfecto porque tu y James ahora son novios.

- pero aun no se lo digo del todo a James así que... te pido que no le digas. - ella asiente con la cabeza.- bien, bajemos. Quiero conocer al famoso Patrick.

- oh ¿ahora? No se si...

- vamos. - tomé de su mano y bajamos corriendo las escaleras. La fiesta seguía, claramente. Todos estaban por separado, en diferentes grupos. Pero claro que los chicos estaban con los de siempre. Y ah si, Patrick. Corrí a los brazos de James y este me recibe con un beso. - ¿de qué nos perdimos?

- Patrick nos contaba sobre sus veranos en Italia. - dice Remus. - es algo que disfruta mucho y dijo que nos va a invitar ahora que nos graduemos. ¿Qué dices Kate? ¿Nos acompañas?