Yeonjun es un pésimo estudiante en Economía, es la única materia que no le gusta de su carrear, por lo que tiene que contratar a un profesor particular. Pero nunca esperaría que fuera el lindo chico con el que intento coquetear en el parque.
Un amo...
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Maratón 1.
Yeonjun
Me levante con mucha energía y muy feliz. Saber que Soobin ve más allá de mi aspecto es algo increíble. Sentía que este día iba hacer Genial. Sin embargo no pude haber estado más equivocado.
Estaba entrando a la universidad y por estar pensando en todo lo que ocurrió ayer con Soobin y lo lindo que se porto conmigo no me fije por donde caminaba , termine chocando con alguien, alguien a quien conozco perfectamente y desearía no hacerlo.
Sentí como se me fue el color de la piel, el corazón me empezó a latir extremadamente rápido por los nervios, mis piernas se debilitaron y solo quería huir de allí lo más rápido posible. Pero no pude, solo me quede plasmado viendo al chico alto, rubio de ojos verdes, que una vez adore con todo mi ser, pero que termino destruyéndome de la forma más cruel posible. Pude notar en su rostro cierta sorpresa, aunque esa expresión cambio rápidamente a una divertida. Odie ser tan débil y seguir pensando que lucia asquerosamente atractivo cada vez que sonríe. Claramente ya no me gusta y lo único que puedo sentir al verlo es dolor, no obstante me fue muy difícil superarlo, es más, todavía sigo teniendo pesadillas con él y cada vez que me miro en el espejo no puedo evitar pensar en cada una de sus palabras.
-Oh yeonjun, pensé que no te volvería a ver- Dijo William mientras me miraba desde los pies a la cabeza- Sigues estado igual de bueno, aunque te quedaba mejor el azul.
Me encantaría decir que lo que dijo no me afecto, pero no es así. Por mi mente paso la idea de que tal vez estaba en lo correcto y es mejor que cambie mi color. Pero decidí que no lo haría, no podía seguir haciéndole caso a William.
-¿No te alegra verme ? ¿Por que no dices nada?
Empezó acercarse lentamente a mi y yo no podía moverme. Aprete mis puños, y cuándo estábamos lo suficientemente cerca como para sentir nuestras respiraciones sentí como mis ojos empezaban a humedecerse. No quería que me besara, tenía mucho miedo, pero lo peor de todo es que no era capaz de alejarlo . Pensé en que tal vez había logrado avanzar un poco, pero ya se que estaba muy equivocado.
Cuándo nuestros labios ya se estaban rozando William se alejo repentinamente, abrí los ojos y vi como Soobin lo estaba golpeando repetidas veces. Las lagrimas comenzaron a salir de mis ojos sin permiso, me sentí aliviado de que Soobin me salvara, pero golpear a William lo meterá en problemas y yo definitivamente no quería eso. Si no fuera porque no tenía fuerza en las piernas lo hubiera ido a detenerlo, lastimosamente los sentimientos abrumadores me estaban consumiendo y lo único que lograba era llorar en el piso.
En un momento Soobin noto esto y se alejo rápidamente de William para abrazarme. Sus brazos eran cálidos y él olor de su perfume impregnado en su cuello me tranquilizaba mucho, parecía como si Soobin tuviera algún tipo de medicina para quitarme cualquier sentimiento negativo.
