Misión completada ||Yoonmin||

15

Jimin observaba a Yoongi, quien se encontraba cocinando. Su rostro estaba serio y su cabello mojado caía sobre su frente.

Llevaba una playera negra y unos pantalones de tela del mismo color que la playera.

Jimin se encontraba sentado en el sofá mientras tenía un pequeño puchero en su labio.

¿Campamento?

Si por supuesto. Yoongi había dicho una pequeña mentira para tener a Jimin en su casa por mucho tiempo.

- ¿Por qué me miras así?- Pregunta Yoongi sin siquiera dirigir su mirada a Jimin.

- Creí que realmente iba a ser un campamento- Se queja Jimin mientras se levantaba del sofá y caminaba a la cocina para quedar al lado de Yoongi, quien lo mira unos cortos segundos antes de volver su mirada a la comida.

- ¿Querías compartir con otros chicos?- Pregunta Yoongi- Que ofensa.

- No, por supuesto que no- Dice Jimin- Ya.. no importa.

Yoongi sonríe y niega antes de apagar el fuego y mirar a Jimin.

- Si gustas vete- Dice a lo que Jimin lo mira.

- No quiero- Dice.

- Te enseñaré cosas, Jimin- Yoongi acaricia la mejilla del castaño- Volverás completamente diferente a tu casa.

Jimin ladea su cabeza y mira a Yoongi, quien sonríe con delicadeza antes de dejar un corto beso en los labios del castaño.

- Y desearás ya nunca volver a estar con alguien más- Jimin muestra una sonrisa traviesa- ¿Ahora seguirás haciendo pucheros? De verdad tengo ganas de morder estos preciosos labios.

Yoongi dirige su pulgar a los labios de Jimin y los acaricia, mientras acercaba su rostro al del contrario.

- ¿Sabes? Tengo apetito de otra cosa- Dice Jimin mientras comenzaba a bajar su mano por el torso de Yoongi hasta llegar a la entrepierna de este donde da un pequeño apretón.

Yoongi sonríe mientras pasaba su lengua por sus delgados labios. Toma a Jimin de la cintura y lo sienta en la encimera.

El castaño abre sus piernas y abraza la cintura del pálido, quien sonríe mientras comienza a acariciar la cintura de Jimin.

Yoongi toma el labio inferior de Jimin entre sus dientes y tira levemente de este bajo la atenta mirada de Jimin.

Cuando iban a juntar sus labios un fuerte golpe provino de la puerta trasera, provocando que ambos se sobresaltaran.

- ¿Que fue eso?- Pregunta Jimin asustado.

Yoongi dirige su mano hacia un cuchillo que estaba sobre la encimera y se aleja de Jimin para caminar hacia la puerta trasera.

- Hyung, tenga cuidado- Susurra Jimin mientras se bajaba de la encimera y caminaba tras el pálido.

- Mantente atrás mío- Dice Yoongi y toma la manilla de la puerta para así comenzar a doblarla hasta el punto de que ya la puerta estaba completamente abierta.

Yoongi sale de la casa y observa a todos lados.

- No hay nada- Dice Yoongi dándose la vuelta para mirar a Jimin- Seguramente fue un animal.

Jimin no muy seguro asiente mientras su mirada se dirigía hacia la pequeña bodega que estaba a unos metros de la casa.

Ambos se adentran a la casa y Yoongi observa el cuchillo en su mano, para enseguida mirar a Jimin, quien caminaba hacia la cocina.

Por su mente comenzaron a pasar imágenes de Jimin suplicando y con su rostro lleno de sangre. Una pequeña sonrisa apareció en su rostro, pero pronto la borra y niega.

Aprieta el cuchillo con fuerza y camina hacia la cocina para guardar todo objeto peligroso.

- ¿Que hace?- Pregunta Jimin a Yoongi.

- Nada- Responde y enseguida camina hacia el baño.

Jimin algo confundido se acerca a la ventana que daba al patio trasero y observa la bodega.

De verdad tenía muchas ganas de ir allí.

Estuvo tanto tiempo mirando aquella bodega que no se dio cuenta cuando Yoongi sale del baño y lo queda mirando desde una distancia prudente.

Lo miraba de una manera tan intensa y penetrante que sabía que Jimin le tendría miedo.

En su mente perversa solo estaba la idea de torturar a Jimin.