LA CITA DE MI JEFE

CAPÍTULO 30 "FURICA"

Narra Carly
Me senté y no podía con la intriga, sentía que algo no andaba bien.

-¿En qué tanto piensas?. -Pregunto Riri.

-No lo sé. Hay algo que no me gusta, tengo un presentimiento... Malo. -Arque ambas cejas.

Pensé un poco y me vino una idea a la cabeza. Tomé mi agenda y revise mis pendientes, sentí la mirada de Riri, se acercó y me miraba sin entender.

-Tengo un juicio a las tres y cuarto. -Mordí mi dedo y seguí viendo mis pendientes.

-¿Qué tramas Carlota?.

-Debemos saber que esta sucediendo. Es imposible que ambos se ausenten teniendo el caso del Latino en puerta.

-Tienes razón. -Asintió. -¿Y qué tienes planeado hacer?

-Iremos a ver a Barb y saber que sucede... Porque insisto. Hay algo que no me gusta.

Narra Daryl
Llegué al Pent House de Robert y abrí la puerta con la llave que me dio desde que se cambió a este lugar.
Al entrar vi vidrios rotos en el suelo, frunci el ceño a esto, temía lo peor. Busque a Robert y lo vi tirado al lado de su sofá con una foto arrugada en su mano.
Me acerque a él y estaba bien, había varias botellas de alcohol en el suelo.

-Rob. -Susurré mientras lo movía despacio.

Él se quejo y se movió un poco.
Lo tomé en mis brazos y lo intenté levantar, fue super agotador, pues no coopero y estaba aún inconsciente.
Logre levantarlo y lo lance al sofá.
Abrió los ojos y de golpe los cerró a causa de la luz.

-¿Qué ha pasado?. -Alce las manos. -Este lugar es un asco. -¿Tomaste?.

Robert, tenía la vista pérdida. Algo tenía, su mirada transmitía cierta tristeza.

-¿Rob?.

Me arrodille enfrente de él y trate de verlo a los ojos, pero seguía con su mirada en la nada.
No entendía que pasaba. No decía nada y solo sollozaba, entonces me miró y vi como sus ojos se llenaron de lagrimas.

-Me dejó. Barbara, me dejó. -Dijo con la voz quebrada.

Tapó su rostro con sus manos y cayó en llanto.
No me esperaba esa respuesta y me quedé petrificado, lo único que pude hacer fue abrazarlo y dejar que desahogue su sufrimiento, sabía que le serviría.

Narra Carly
Llegamos al departamento de Barb y tocamos la puerta, no nos abrió, lo volvimos a intentar y grito desde dentro: ¿Quien?.

-Somos nosotras Barbie. Carly y yo. -Respondió Riri.

Tardo un poco, pero abrió la puerta y no la vimos, estaba detrás de la puerta. Ambas entramos y estaba con el cabello despeinado y con una camisa de hombre de botones puesta.

-Venimos a hablar contigo porque no te presentaste a trabajar. -Dije mirándola fijamente.

-¿Quien les dijo qué vinieran, Robert las mandó?. -Pregunto un poco molesta.

-No. Venimos porque nos preocupas.

Nos sentamos en un sofa de Barb, la cual se sentó en otro frente a nosotras y no nos dirigía la mirada.

-¿Qué fue lo qué pasó? Creemos que algo grave porque...

-Fui una tonta. -Interrumpió.

Al fin levantó la mirada y notamos que tenía los ojos rojos e hinchados, se veía cansada y con ojeras.

-Me enamoré de él y confundí las cosas. Yo quería una relación estable y él solo quería una farsa para volver con su ex, volvió con ella y yo quedé como estúpida. -Explicó mientras poco a poco sus ojos se llenaron de lagrimas.

-Barb, no creo que sea cierto. Robert, te ama. -Dijo Riri.

-¡Ustedes no vieron lo que yo vi!. -Exclamó molesta.

-Nos basta con ver como te mira, como te trata...

-Fue un gran actor. Y ustedes unas tontas por haberle creído también.

-No somos tontas...

-¡Bueno ya!. -Gritó alterada y poniéndose de pie. -Si vinieron a defender a Robert y decirme lo mierda que soy, pierden su tiempo.

-Barbie. -Dijo Riri y se puso de pie enfrente de ella. -Solo queríamos saber como estas y ayudarte, nada más.

-Pues no me ayudan en nada. Así que váyanse y díganle a Robert que me deje en paz.

-¡Que Robert no nos mandó!. -Dijo Riri ya un poco más molesta.

Ambas empezaron a discutir y me puse de pie. Me paré en medio de ambas e intenté calmarlas.

-Sabes que... Estas loca y si sigues con ese temperamento te quedaras sola. -Dijo Riri para tomar su bolso e ir a la puerta.

-Si. Pero al menos yo si podré llegar a ser madre.

-¡Barbie!. -Exclamé molesta.

Riri, se quedó parada en la puerta unos segundos y volvió para decirle algo a Barbie.

-Sabes. Deseo de todo corazón que jamás pases por un problema así. -Dijo con una voz cortada. -Porque no sabes el dolor que sienten las que si sueñan con ser madres. Y espero Robert te saque de su corazón, porque eres un asco. -Dijo para por fin irse del departamento.