Todo el día pasó con YeonJun encerrado en la habitación y SooBin jugando y cuidando a JinSung.
—Hola... —saludó JinSung tras la pierna del alfa que entregó dinero al muchacho de las entregas que sonrió hacia el niño, devolviendo el saludo.
SooBin había hecho un pedido a domicilio de una caja de bombones de chocolate, junto a fresas para JinSung.
—Papito, las fresitas, dame, dame —pidió cuando el alfa entró por completo, cerrando la puerta, SooBin caminó a la cocina, mirando al niño insistir mientras jalaba su ropa.
—Debes esperar un momento, JinSung, tengo que cortarlas —explicó, JinSung negó con la cabeza.
—¡Yo puedo solito! —insistió recibiendo una mirada del alfa que achicó los ojos antes de dejar el envase de fresas en la encimera.
—Hay que lavarlas primero, hijo.
—Yo lo hago, papito —afirmó emocionado, SooBin sonrió levantando al niño en brazos, lo dejó sentado en la encimera.
Le buscó un gran envase con agua y otro plato, junto a una servilleta.
—Vas a tomar una por una, la lavas y la colocas aquí para que se sequen.
—Si —asintió muy seguro, tomando la primera fresa. JinSung siempre mostraba esa iniciativa de querer hacer las cosas él mismo y los adultos le dejaban hacerlo, siempre y cuando fuera seguro para él.
Porque JinSung quería hacer cualquier cosa, sin medir el peligro, de hecho la semana pasada había llorado el día que no lo dejaron freír su propia carne.
—¿Así, papito? —preguntó, arrojando una fresa a la servilleta, SooBin la tomó con cuidado, dejándola en el plato.
—Si, pero no las arrojes, hay que tratar a las fresas con cuidado —explicó, JinSung miró una fresa en su manos mojadas.
—¿Les duele?
—Si, claro que les duele —asintió SooBin seriamente, JinSung le prestó atención— Imagina que tú eres una fresa, no te gustaría que te arrojen, ¿Verdad?
—No, papito...
—Bien, entonces ésta fresa... —SooBin tomó la segunda fresa ya lavaba del niño, la dejó con cuidado sobre la servilleta que absorbió lo sobrante del agua, luego la pasó al plato— Hay que tratarla con cuidado.
—¡Y mucho amor! —apoyó JinSung empezando a lavar y dejar las fresas con cuidado, haciendo muecas de concentración que enternecían al alfa por el parecido con su pareja.
Y hablando de fresas...
—¿Tienes hambre otra vez? —preguntó YeonJun levantándose con una lentitud de la cama, miró su abdomen mientras caminaba al baño de la habitación— No sé a quien engaño, soy yo el que tiene hambre —murmuró lavando su cara. Luego de terminar sus galletas, y todo aquel comestible de la habitación, había caído dormido sin tener la noción del tiempo.
Y ahora, tenía hambre.
Suspiró mirándose al espejo.
Mi gordito bonito.
Recordó el apodo del alfa, frunció el ceño.
—Jum, es verdad que estoy gordito... Pero no me quita lo bonito —se habló a sí mismo por el espejo, ahora que había pasado mucho tiempo e incluso había dormido, se estaba dando cuenta de que el apodo no había sido malintencionado y mucho menos una burla.
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Another Soft Story || TaeGyu
FanfictionUna pareja estable, a nivel de trabajo, a nivel emocional, ser predestinados solo hacía todo más intenso. La rutina que habían llevado por años, se vería un poco afectada, solo un poco, por un pequeño olvido del omega. Aunque por un día que no tomar...