Ocurrida la lesión del ligamento cruzado en la rodilla de Alexia Putellas y a falta de personal médico en el FC Barcelona Femení, Joan Laporta, el presidente del FC Barcelona, contrata a una nueva fisioterapeuta personal, Mara Montenegro, cuando rec...
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Alexia
Después de un viaje inolvidable para ambas, hoy tomábamos el avión de regreso a Barcelona, ya tenía más de la semana del reposo, y Mara dijo que mientras más rápido retomara todo, sería mejor.
Nos levantamos temprano como a las 3:30 am que en mi horario es de día, así que no me afecto mucho, ni a Mara, ya se había acostumbrado al cambio de horario, nos metimos a bañar, tristemente por separado, Mara hizo el desayuno, la cama, las maletas, salí de bañarme, Mara se metió a bañar, desayune, no teníamos mucha prisa, nuestro vuelo salía a las 1:00 pm.
Así que metimos todo en el coche, salimos del hotel y fuimos a despedirnos de la familia de Mara, me prometió que sería breve, que ni siquiera entraríamos a la casa, que ellos saldrían y nos quedaríamos en el coche, lo cual me daba alivio por si algo salía mal.
Fuimos a la casa de la familia de Mara, y salieron todos, en manada, a dar abrazos tanto a Mara como a mí, imagínense si casi me quedo sin respirar cuando me vieron por primera vez, imagínense despidiéndose, pero no me malinterpreten, es bueno saber que a pesar de conocerme hace muy poco tiempo, y tan solo una vez, me tienen un poco de cariño, solo es cuestión mía de acostumbrarme a ese tipo de cosas.
Fuimos al aeropuerto, dormimos un poco más, hasta que llego la hora de subirnos al avión, este viaje ha estado lleno de sorpresa y en el regreso Mara me sorprendió, comprando pasajes de primera clase, pensé que iríamos en turista, pero no me quejo para nada, aparte podía estirar la pierna, para no tener la rodilla flexionada, había todo tipo de comida y claro salmón, que tanto me gusta, Mara pidió una milanesa, que es su comida favorita.
Bajamos del avión y dije casi gritando.
—¡Por fin, regresamos a Barcelona! —A lo que todos a mi alrededor me vieron con cara de loca, excepto Mara, claro que ella se río conmigo.
—¿Tan feo fue ir a México? —Dijo Mara sarcásticamente.
—No, me refiero al largo viaje en avión.
—¡Más te vale!
Fuimos por el coche de Mara y metimos todo y fuimos a su casa, ya tenía mensajes de todas las del equipo, incluyendo Laporta, sobre si ya habíamos venido, si todo salió bien y cuando regresábamos, pero decidí responder después cuando ya tengamos todo afuera de las maletas y estuviéramos descansando.
Estábamos completamente cansadas, el viaje de México a Barcelona es largo, lo único que quería era descansar, así que Mara y yo nos acostamos en la cama y nos quedamos dormidas, talvez alrededor de 2 horas, y cuando despertamos ambas, teníamos el móvil lleno de mensajes y llamadas perdidas, todas eran de Laporta, quería saber como habíamos llegado y todos los detalles, pero tampoco es para que llamara y escribiera tanto, le regresamos la llamada, para que se quedara tranquilo y dijo que tenía información que decirnos.
—¡Me tenían bastante preocupado! ¿Por qué no contestaban? —Dijo Laporta preocupado y yo empecé con mi modo sarcástico.
—¿Sabes lo cansado que es un viaje? Más con la rodilla rota, tengo que caminar más despacio y teníamos ganas de nada, aparte estábamos dormidas.
