Ocurrida la lesión del ligamento cruzado en la rodilla de Alexia Putellas y a falta de personal médico en el FC Barcelona Femení, Joan Laporta, el presidente del FC Barcelona, contrata a una nueva fisioterapeuta personal, Mara Montenegro, cuando rec...
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Mara
Me quedé viendo con Nicolás, con una cara de vergüenza, con lo que había dicho Mapi, estaba bastante apenada con Nicolás, por lo que había hecho Alexia y Mapi, bueno más Mapi, en que Alexia se podría estar sintiendo igual que yo.
Cuando se fueron Nicolás se empezó a reír, no estaba ni enojado, ni se lo había tomado mal, algo que me daba consuelo por lo que había pasado.
-Ella me cae bien. -Dijo Nicolás.
-¿Mapi o Alexia? -Le pregunté.
-Mapi, ella dijo exactamente lo que yo pensaría solo que en una forma más sarcástica y divertida. -Dijo Nicolás coqueteando un poco.
-Pues con esto a mí no mucho, aunque si me debo de llevar bien con ella, y supongo que ella es así. -Dije.
-Pero igual lo siento, ellas no debieron hacer una emboscada en la puerta, y de paso te trajeron a ti con todo el problema. -Le dije apenada.
-No importa, lo que sea que tienen ya lo arreglaran, mientras tú y yo tenemos algo pendiente. -Me dijo coqueteando mientras ponía sus manos en mi cintura y me subió a la mesa de la cocina, mientras que nos besábamos.
Se quitó el sudadero que tenía puesto y en eso sentí con mi pierna el bulto en su pantalón, se lo quito y estaba completamente desnudo, luego me desnudo a mí también, me quito la blusa y el jeans que tenía puesto. Nos estábamos besando mil y una veces, mientras agarraba la protección en su bolsillo y se lo puso.
Empezó a humedecer sus dedos para meterlos dentro de mí.
-Para qué los humedecí, si tú ya estabas muy mojada. -Dijo Nicolás bromeando mientras me seguía besando, a lo cual solo me reí y lo seguí besando.
Luego procedió a meter sus dedos dentro de mí o lo que yo solté un gemido, siguió metiendo y sacando sus dedos cada vez más rápido y ese ritmo iban mis gemidos cada vez eran más fuertes, cada vez era más placentero.
Nico sacó sus dedos y metió su parte dentro mío, y gemí y gemí, Nico cada vez lo hacía más y más rápido, le encantaba escucharme, gemir, me besaba, me tocaba y me daba placer y yo gritaba su nombre.
-¡Ahhhh, Nico! -Grite gimiendo, lo cual sabía que a él le encantaba.
Nico siguió y empezó a hacerlo muy rápido, hasta que llegue al orgasmo y el igual, juntamos nuestras narices, agarro mi cara y la dirigió más hacia la suya para besarme.
-Eres hermosa, nunca me quiero separar de ti amor, tu cara es hermosa, no hablemos de tu cuerpo, y lo linda que le miras cuando hacemos el amor. -Me dijo Nico, a lo que respondí besándolo.
Me cargo hasta mi habitación, me dio una camisa de él y mi ropa interior para qué me cambiará, y cuando termine entró Nico, y nos acostamos en la cama, nos besamos un poco más hasta que se son durmieron los labios, y ambos nos dormimos.
No me odien, vendrán ya capítulos con Alexia y Mara.
